El secretario adjunto de la nueva central, Guillermo Pereyra, consideró que el oficialismo busca controlar a las provincias a través de la reglamentación de la Ley de Soberanía Hidrocarburífera
Guillermo Pereyra fue elegido como nuevo secretario adjunto de la CGT conducida por Hugo Moyano en su rol de titular del sindicato de Petróleo y Gas privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa. Si bien en un primer momento se mostro conciliador con el oficialismo ahora optó por un cambio de estrategia.
El gremialista consideró que la reglamentación de la nueva Ley de Soberanía Hidrocarburífera que se conoció la semana pasada es “una barbaridad que representa el avasallamiento a los estados productores“.
“Se están violando leyes fundamentales, como la constitución nacional con las respectivas reformas y la ley corta de hidrocarburos”, sostuvo Pereyra, quien reclamó que las provincias concurran a la Justicia contra la normativa.
La nueva ley fue votada por el Congreso de la Nación junto con la expropiación del 51% de YPF. “El Plan Nacional de Inversiones Hidrocarburíferas tendrá como ejes estratégicos el incremento y la maximización de las inversiones y de los recursos empleados en exploración, explotación, refinación, transporte y comercialización de hidrocarburos para garantizar el autoabastecimiento y la sustentabilidad de la actividad en el corto, mediano y largo plazo”, establece el cuerpo del texto.
