La madre y la hermana de Juan Pablo Torroija hicieron la solicitud ante la Cancillería.
La familia de Juan Pablo Torroija, el okupa muerto en Girona, España, luego de ser detenido por la policía, solicitó al Estado argentino que se presente como querellante en la causa que tramita la justicia catalana porque consideran que el muchacho fue asesinado.
Ana Sol Torroija y Élida Domínguez, hermana y madre de la víctima, le pidieron al director de Asuntos Consulares de la Cancillería, Rubén Buira, que “evalúe la participación judicial del Estado argentino en la causa, teniendo en cuenta las sospechas que existen sobre el tipo de delito, así como la serie de irregularidades hasta ahora sucedidas, violatorias en una primera instancia de la Convención de Viena sobre las Relaciones Diplomáticas y sobre el Derecho de los Tratados.”
Las mujeres reconstruyeron que Juan Pablo fue detenido el 10 u 11 de julio por la noche por agentes de los Mossos D’Squadra en la calles de Girona, aunque todavía no saben las razones. También que fue golpeado con saña y llevado a una comisaría de Vista Alegre, y que recién a las cuatro de la mañana del 11 ingresó a la Guardia del Hospital Josep Trueta, en un estado de extrema gravedad, donde agonizó hasta su muerte el día 14.
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