El ministro de Planificación, Julio De Vido, empezó ayer en Brasil una serie de reuniones para atraer potenciales inversores para la construcción de dos nuevas usinas hidroeléctricas en la provincia de Santa Cruz.
Acompañado por el secretario de Obras Públicas, José López, De Vido mantendrá encuentros con los industriales nucleados en el Centro de Industrias del Estado de San Pablo (CIESP). El objetivo es relevar el interés de los empresarios para participar en la construcción de las usinas “Néstor Kirchner” y “Jorge Cepernic” –antes denominadas Cóndor Cliff y La Barrancosa– que ubicadas sobre el río Santa Cruz (el cuarto más caudaloso del país) aportarían, una vez terminadas, un total de 1740 megavatios (MW) de potencia al sistema interconectado nacional, que se repartirán en unos 1140 MW en la Néstor Kirchner y los restantes 600 MW en la Cepernic.
Este volumen de producción transformaría al complejo en la tercera hidroeléctrica en importancia, detrás de las binacionales Yacyretá (3200 MW) y Salto Grande (1890 MW).