El ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, afirmó que la “arbitraria decisión” José Manuel de la Sota, de clausurar tres antes de la Televisión Digital Abierta “obedece a la defensa de intereses inconfesables” y “constituye una muestra de intolerancia y odio, creando un peligroso precedente de censura”.
A través de una columna de opinión publicada hoy en el diario Página12 y titulada “El odio ciega y lleva a la autodestrucción”, De Vido volvió a cuestionar la medida adoptada por De la Sota en las localidades de Río Cuarto, Leones y Villa María, y aseveró que la misma fue adoptada “a partir de excusas burocráticas que atentan contra el más elemental sentido común”.
“Quiero creer que este verdadero castigo a la industria cordobesa fue producto del odio porque ninguna diferencia política puede justificar que se ataque al propio trabajo de los cordobeses, que en todos los casos es de excelencia, tanto por la calidad de sus profesionales y la audacia de sus pequeños empresarios que apostaron desde un principio por la televisión digital”, indicó el ministro de Planificación.
En cuanto a la cuestión ambiental, principal argumento que De la Sota plantea para clausurar las antenas de la TDA en su distrito, el titular de la cartera de Planificación señaló: “En el mundo existen en funcionamiento desde hace 10 años más de 3.500 plantas transmisoras de televisión digital de todos los estándares, similares a las que absurdamente silenció la provincia de Córdoba, sin que se haya registrado ningún inconveniente ni denuncia”.
De Vido también sostuvo que “resulta muy curioso que desde el gobierno de Córdoba afirmen que la instalación de las antenas los `sorprendió´ y que es `otro atropello´ del gobierno nacional, como si la construcción de una antena de 80 metros pudiera pasar desapercibida y hacerse entre gallos y medianoche”.
“Más llamativo es en el caso de Río Cuarto, donde la antena fue levantada con la autorización correspondiente en un predio de la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (EPEC), en un terreno que no era un espacio abandonado sino un predio sujeto al control de entradas y salidas”, ejemplificó el funcionario nacional.
En ese sentido, añadió que “en el caso del Cerro Mogote de Córdoba Capital, donde está ubicada otra de las antenas, mal puede reclamarse por el daño ambiental cuando la de TDA funciona al lado de torres muchísimo más potentes de Multicanal o Radio Mitre”.
“Además, basta realizar una breve recorrida por esa ciudad para constatar que las antenas del Canal 12, perteneciente al Grupo Clarín, están en medio de la población, por no mencionar los tendidos aéreos de Cablevisión que atraviesan las ciudades no sólo de Córdoba sino de todo el país, sin ninguna regulación, o el servicio que Fibertel continúa prestando de manera ilegal por cautelares truchas”, finalizó De Vido su nota de opinión.