El presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, respondió hoy al pedido del gobierno de la Provincia de Buenos Aires de reformar el sistema de coparticipación federal, que realizó el jefe de Gabinete bonaerense, Alberto Pérez, a través de una carta. “Se equivocó de ventanilla”, dijo Domínguez, y agregó que una reforma del sistema de reparto de fondos “sólo puede hacerse con un acuerdo entre todos los gobernadores”.
En una entrevista con el diario Página 12, el ex ministro de Agricultura pidió evitar “las propuestas individuales que conspiran contra una construcción colectiva” y afirmó que el debate sobre la coparticipación debe iniciarse “con el consenso de todos los gobernadores”, como lo establece la Constitución. “Necesita un diálogo entre los propios gobernadores con la Presidenta”, agregó.
En ese sentido, afirmó: “Vamos a pensar que el planteo lo hicieron en la ventanilla equivocada porque le encomendaron la tarea a un funcionario y no lo hizo el propio gobernador”. Domínguez sostuvo que el debate “debe tratarse en el nivel adecuado que se merece y que prevé la Constitución”, y recordó que esa “fue la convocatoria de Néstor Kirchner en 2004 en el seno del Partido Justicialista”, que finalmente fracasó por diferencias entre las provincias.
“La Nación tiene que compensar en asistencia a un montón de municipios con la asignación de recursos que prevé el propio Estado nacional, precisamente por el impedimento que trabó el artículo 75 de la reforma constitucional del año ’94”, señaló el diputado, y añadió: “En algún momento cuando la Argentina discuta la nueva ingeniería jurídica, este es un motivo más que suficiente como para volver a discutir cuál es el pacto entre las provincias en la distribución de los recursos coparticipables”.
Por otra parte, cuestionó el apoyo que recibió el reclamo de Scioli de parte de la oposición: “Sería extraordinariamente positivo que cada vez que se generan fondos para asistir a los sectores más vulnerables de nuestro país, la oposición nos acompañe parlamentariamente porque si no parece un planteo casi esquizofrénico”.
Además, el presidente de la Cámara Baja se sumó al pedido de otros dirigentes oficialistas sobre la necesidad de una reforma constitucional, aunque negó que esta incluya la posibilidad de un tercer mandato presidencial. “Los tiempos políticos, para los peronistas, los marca nuestra Presidenta. No hay ningún dirigente que pueda reemplazar la conducción política de nuestra Presidenta, ni hay un dirigente visible que encarne la representación de las expectativas de las mayorías populares argentinas como lo encarna CFK. El tiempo será quien hablará y el pueblo dará las señales que tenga que dar”, indicó.