El Vaticano reiteró este martes que el matrimonio heterosexual es “la base indispensable para la formación integral del niño” en el documento preparatorio del próximo Sínodo de la Familia y en relación con las adopciones.
“Para dar una familia a tantos niños abandonados, muchos han pedido que se destaque la importancia de la adopción. A este respecto se ha señalado la importancia de afirmar que la educación de un hijo debe basarse en la diferencia sexual, así como la procreación”, según el texto.
La XIV Asamblea General Ordinaria tratará sobre “la vocación y la misión de la familia en la Iglesia y en el mundo contemporáneo”, y representará el corolario del Sínodo extraordinario del año pasado, ambos con el propósito de “formar una sola unidad orgánica” para la discusión eclesiástica sobre la familia.
El “Instrumentum laboris” fue presentado en el Vaticano en conferencia de prensa por los cardenales Lorenzo Baldisseri, secretario general del Sínodo; y Péter Erdő, relator general de la Asamblea; además de monseñor Bruno Forte, secretario especial de la Asamblea, de la que participarán representantes de las distintas conferencias episcopales.
En 2014, se desarrolló en el Vaticano la III Asamblea General Extraordinaria del Sínodo de Obispos, convocada por el papa Francisco bajo el lema “Los desafíos pastorales de la familia en el contexto de la evangelización”, como un trabajo previo a la reunión de octubre próximo.
En esa línea, el año pasado Bruno Forte había anunciado que “la gran novedad de la metodología del sínodo, que antes aparecía encorsetado, es este período entre los dos sínodos, porque va a involucrar a la base de la Iglesia, a los demás obispos y a los fieles”, al tiempo que Baldisseri detalló que “las dos Asambleas sinodales, centradas en la temática de la familia, resultan integradas en un único proceso sinodal, que incluye no sólo dos etapas celebrativas, sino también el tiempo intersinodal, tiempo de reflexión sobre la recepción del primo-sínodo y de profundización teológico-pastoral en vista del segundo sínodo”.
El Sínodo de los Obispos es una institución permanente, creada por el papa Pablo VI el 15 de septiembre de 1965, en respuesta a los deseos de los Padres del Concilio Vaticano II para mantener vivo el espíritu de colegialidad nacido de la experiencia conciliar, explica el Vaticano en la convocatoria.
De acuerdo a la primera lista de participantes publicada por el Vaticano en marzo pasado, de Argentina participarán los monseñores Pedro María Laxague, José María Arancedo y el Cardenal Mario Poli.