Cansado de negar los despidos, el Gobierno cambió de postura y convocó a empresarios para avanzar en un compromiso de no despedir. Fue el último intento de parar la emergencia ocupacional y que los gremios desistan de su aprobación.
El documento que firmaron empresarios y el Gobierno habla de “un cambio positivo en la Argentina” y señala que la ley antidespidos que se discute en la Cámara de Diputados “dificulta las nuevas inversiones y genera el efecto contrario al que dice buscar”.
Tras negar uqe haya despidos, Cambiemos finalmente los reconoció y con los empresarios acordó que no iban a “reducir” sus “planteles” de trabajadores por tres meses, pero rechazaron que se fije esa prohibición por ley, como se discute en el Congreso sin el respaldo de la administración de Mauricio Macri.
El documento se titula “Compromiso por el empleo” y fue acordado por el sector empresario “ante el momento de cambio positivo que está viviendo la Argentina y de transición económica que genera dificultades de corto plazo en los argentinos”.
Se trata de un pacto de tres puntos, que empieza con “no reducir” sus “planteles de empleados durante al menos los próximos 90 días”.
“Generar planes de inversión para promover más puestos de trabajo”, es el segundo punto del acuerdo, mientras que en el tercero los empresarios se comprometen a: “Trabajar junto al gobierno nacional y a los sindicatos en una agenda de desarrollo y de mejora de calidad del empleo en el país, sector por sector”.
Según subrayaron en el texto, “las medidas que está tomando el gobierno nacional son las adecuadas para alentar la creación de nuevos puestos de trabajo”.
“Por el contrario, consideramos que la propuesta de ley antidespidos que tiene media sanción en el Congreso introduce un cepo al trabajo que dificulta las nuevas inversiones y generará el efecto contrario al que dicen buscar”, resaltaron los empresarios.
El acuerdo fue firmado durante un encuentro de los referentes el sector empresario con el presidente Macri y el ministro de Producción, Francisco Cabrera, en momentos en que los despidos están en el centro de la escena política nacional y en el Congreso se discute una ley que busca frenarlos por 180 días, con la incorporación de la doble indemnización.
Este es el último intento del gobierno para tratar de lograr que los gremios bajen la presión por la emergencia laboral y no insistan en su aprobación. Sin embargo parece que la ley seguirá su cauca y que el miércoles la Cámara Baja le dará su aprobación.