Marcelo Bonelli, acusado por la Presidenta

En su discurso de ayer, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner pidió “una ley de ética para periodistas” y señaló al periodista económico y conductor de medios del Grupo Clarín, Marcelo Bonelli, de quien “un familiar y un socio recibían por año 240 mil pesos en conceptos que no sabemos cuáles son”.

El periodista contestó a través de una columna publicada en el diario Clarín donde acusó al Ejecutivo de desprestigiarlo, admitió que “no está de acuerdo con el discurso único del oficialismo” y aseveró que todos sus ingresos “están en blanco y declarados ante la AFIP”.

Además, reconoció que su esposa trabajó para Repsol “como profesora de inglés” pero no negó la cifra que dio la Presidenta ni aclaró la situación de su socio. “Para la Presidenta trabajar es delito”, lanzó. “La intención es sembrar dudas, desacreditar, tratar de desvirtuar una información certera, tratando de sembrar el desprestigio”, finalizó.

Por su parte, la Presidenta señaló ayer: “Desde que ingresamos a la compañía se pagaban 11 millones de pesos por año en periodistas, en publicidad no convencional. ¿Cuál es la publicidad no convencional?”, se preguntó la mandataria, para luego puntualizar: “Facturas que se pagan como publicidad, pero la publicidad no aparece.”

Sobre el tema, Cristina fue directa y expresó su deseo de que la normativa legal se ocupe de estas irregularidades. “Tendría que haber una ley que así como los funcionarios, el Poder Ejecutivo, el Legislativo, los jueces, tenemos que declarar los bienes, el cuarto poder por lo menos debiera publicar de qué empresas recibe dinero, quién les paga, para que cuando leamos un artículo sepamos”.