Buscan nuevas alternativas para discutir las paritarias de este año

La coyuntura económica y la falta de actualización en el piso de la cuarta categoría del Impuesto a las Ganancias han generado una alteración en la dinámica de las negociaciones salariales de este año. El arreglo parcial firmado por Bancarios con las cámaras patronales del sector plasmó una estrategia que están tratando de poner en marcha otros sindicatos. El gremio que encabeza el moyanista Sergio Palazzo acordó un aumento a cuenta del 20% para el salario mínimo y sentarse nuevamente en marzo para definir la nueva escala salarial. Para esa fecha, tanto empresarios como gremialistas aspiran a que se haya producido alguna novedad con respecto al mencionado tributo y de esa manera cerrar un acuerdo definitivo. Gremios como Luz y Fuerza, los estatales de ATE y los trabajadores de estaciones de servicio anunciaron que plantearán acuerdos salariales semestrales y que pretenden sentarse a negociar nuevamente en julio, de acuerdo a cómo evolucione el índice inflacionario. En este marco, el Ministerio de Trabajo advirtió a través de un comunicado que “sólo homologa acuerdos de vigencia anual o por plazos mayores” y convocó a los dirigentes bancarios y empresarios para mañana en la sede de la cartera para “precisar el contenido, aplicación y duración del acuerdo salarial”.

Mesa de negociacion. La CGT de calo reclama una actualización del 57 por ciento para ganancias.
Mesa de negociacion. La CGT de calo reclama una actualización del 57 por ciento para ganancias.

La falta de definición con respecto a la actualización del mínimo no imponible obliga a los sindicatos a plantear aumentos superiores a la inflación para no perder poder adquisitivo. Es por eso que tanto desde la CGT que lidera el metalúrgico Antonio Caló como la CTA que conduce Hugo Yasky –las dos centrales obreras que mantienen lazos institucionales con el Gobierno– han presentado sus propuestas para elevar el piso del tributo y de esa manera despejar uno de los aspectos que dificultan el normal desarrollo de las paritarias. En la reunión que mantuvieron el lunes pasado, la CGT le planteó al ministro Carlos Tomada que es necesario elevar en un 57% el piso del mínimo no imponible. El cálculo es consecuencia de un

informe elaborado por el dirigente de los docentes docentes privados, Horacio Ghilini. El trabajo sostiene que al no haberse producido modificaciones en los años 2009 y 2012, el impuesto no debería estar alcanzado para los trabajadores solteros que ganan hasta 9.134 pesos y para los casados con dos hijos que perciben 12.494 pesos. De esa manera –sostienen los sindicalistas cegetistas–, los trabajadores afectados recuperarían el poder adquisitivo que tenían en 2009.

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