Como si hiciera falta otra prueba de la desconfianza que existe en el mercado financiero hacia la economía española, el Banco de España publicó ayer un informe en el que señaló que la salida de capitales en el primer trimestre del año alcanzó el récord de 97 mil millones de euros. La cifra sorprende aun más si se la compara con la entrada de capitales e inversiones en el mismo período de 2011, que fue de 20.900 millones.
Desconfianza en la economía ibérica.
Sólo en marzo, entre los retiros de inversores internacionales y lo que los españoles depositaron en el exterior salieron 66.200 millones, casi el doble que en diciembre pasado, el mes que ostentaba la máxima fuga de capitales hasta el momento. Consultado al respecto, el ministro de Economía, Luis de Guindos, consideró que las cifras difundidas no eran “significativas” y rechazó los rumores acerca de un inminente rescate de las finanzas españolas.
