Después de idas y vueltas, la CGT puso la fecha para un nuevo paro general al gobierno de Javier Milei: será por 24 horas el próximo jueves 10 de abril. Y además se incluirán movilizaciones el miércoles 9 de abril desde las 12 horas del mediodía. La medida de fuerza -la tercera de esta índole en lo que va de la administración libertaria- había sido adelantada por el triunvirato de la central sindical luego del primer congreso nacional de la UTEP.

Este nuevo paro general (los anteriores fueron el 24 de enero de 2024 y el 9 de mayo de ese mismo año) se da en un contexto marcado por continuos despidos, la quita de subsidios; la inestabilidad de los precios; la apertura de las exportaciones en detrimento de la industria nacional; la represión a jubilados y organizaciones que se manifiesten; el crimen contra el fotógrafo Pablo Grillo (que sigue en grave estado) y la reciente ratificación de un nuevo endeudamiento con el Fondo Monetario (FMI).

La semana pasada, en el salón Felipe Vallese, Héctor Daer había anunciado que este jueves se realizaría la reunión de consejo directivo de la central obrera para definir “un paro por 24 horas antes del 10 de abril” e invitó “a que nos acompañen a contruirlo”.

Es preciso “fortalecer y cuidar las organizaciones de las mezquindades y egos que aparecen por todos lados. Porque con organizaciones sólidas podemos llevar adelante la voz de los trabajadores y trabajadoras”, dijo el titular de Sanidad en ese momento.

El triunviro reconoció también que el Gobierno, desde la Secretaría de Trabajo, “vienen pisándonos los salarios a través de la homologación de paritarias. Algo que jamás se usó de esta manera para dejar los salarios por debajo de la inflación”, dijo. Luego Daer advirtió que el Presidente supo decir que su modelo es monetario que gira alrededor de cuatro variables: el dólar, el precio mayorista, el minorista y el salario.

“Si el dólar sube un uno por ciento mensual, los precios suben, pero la torta de pesos es la misma. Entonces, no cabe duda que lo que apuntan es a bajar el salario. Alguno dirá que es un problema de los que tienen salarios, pero no, porque es la recesión que comienza a tener consecuencia en toda la sociedad”.