En un Museo del Bicentenario colmado de dirigentes, funcionarios judiciales y militantes, la presidenta Cristina Fernández anunció ayer el envío al Parlamento de las seis leyes que constituyen el proyecto de democratización de la justicia que había anunciado el 1 de marzo en el marco de la apertura de las sesiones ordinarias. “Necesitamos jueces que estén dispuestos a jugarse por una sociedad democrática”, definió la mandataria y advirtió, por primera vez, que para lograr “una justicia legítima, ágil y para todos los argentinos” se deberá trabajar en una reforma del Código Procesal cuando se termine la unificación y modificación de los códigos Civil y Comercial.
Seis leyes para la Justicia.
Se trata de seis leyes que llegarán entre hoy y mañana a la Cámara de Diputados y al Senado, con el objetivo de agilizar el tratamiento. Didáctica y apoyada en un documento, la mandataria repasó durante una hora el alcance y la justificación del espíritu de las seis leyes. Las normas prevén la elección por voto popular de los integrantes del Consejo de la Magistratura; la creación de tres nuevas cámaras de casación; la limitación de las medidas cautelares; el ingreso a la carrera judicial por concurso; la transparencia de las declaraciones juradas en todos los estamentos del Estado y la publicación de los actos del poder judicial.