Cuatro operaciones por $ 1,3 millones, bajo la lupa

Cuatro operaciones por $ 1,3 millones, bajo la lupa

Cuatro operaciones por $ 1,3 millones, bajo la lupa

El Requerimiento de Instrucción de la fiscal Paloma Ochoa al juez de la causa detalla cuatro proyectos presuntamente irregulares que aún suscitan duda y que se llevaron a cabo entre los años 2010 y 2013: son cuatro proyectos para mecenazgo cultural por valor superior, en conjunto, al millón de pesos. Según el documento al que accedió Tiempo, estos fondos que captó Goretti para el supuesto financiamiento de mecenazgo, “luego no se destinaron hacia la finalidad que motivara su asignación (la promoción de actividades culturales, conforme a los proyectos previamente aprobados por el Consejo de Promoción Cultural de la CABA), sino que se desviaron hacia la Fundación Pensar Argentina, mediante el perfeccionamiento de donaciones que tenían en miras financiar actividades político-partidarias del partido PRO”.

El primer proyecto observado es el 219/RPC: el 21 de mayo del 2009, Goretti, en su rol de presidente de la Fundación CEPPA, le solicitó al Consejo de Promoción Cultural porteño la inclusión del proyecto de promoción cultural al proyecto “Difusión del arte precolombino argentino”. El 17 de noviembre del mismo año, el Consejo -integrado por De Almeida, imputado junto a Goretti y Lombardi por lavado- lo declaró de interés, y el 26 de ese mes Lombardi autorizó el desembolso de $ 372 mil. De acuerdo a la Ley de Mecenazgo, el gobierno porteño en este caso recibe de benefactores dinero para esos proyectos, fondos que pasan a ser públicos cuando los capta la comuna. De hecho, en el detalle de este proyecto se especifica que los que aportaron al financiamiento fueron las firmas Santa María SAIF, con $ 15.650; Finma SAIF, $ 55.741; Siderar $ 180.609; y Ledesma SAAI, con $ 120 mil. Lo llamativo es que las tres primeras compañías son del grupo Techint, que también aparece financiando en los otros tres proyectos en investigación. Otro dato importante es que este dinero se depositó en la cuenta Nº 052000255417, “de la Fundación CEPPA, de la cual Matteo Goretti era el único firmante”.

El segundo proyecto, el 702/RPC (“Puesta en valor del Archivo Guemes), inició su camino el 29 de abril de 2010 con el pedido de Goretti. El 2 de noviembre de ese año fue declarado de interés cultural por el Consejo. Y horas después Cultura le habilitó fondos por $ 300.748. Aquí la YPF de la española Repsol y los Eskenazi aportó $ 240.600 y Ledesma $ 60 mil. En este caso, el depósito se hizo a la cuenta 052000271370, también de CEPPA y Goretti.

El tercero de los proyectos fue el 1179/RPC. El 29 de abril del 2011 Goretti pidió mecenazgo por la “Conservación y Digitalización de cuatro archivos históricos”. El 6 de septiembre, el Consejo lo declaró de interés y luego, el 28 de febrero del 2013, Lombardi aprobó el desembolso de $ 237 mil. Esos dineros públicos habían sido aportados por Ledesma ($ 120 mil); Petersen Thiele y Cruz $ 38 mil; y Miavasa SA, $ 49.526. Esta última compañía es una constructora con sendos negocios en el ámbito porteño: a pesar de que en 2007 quedó al borde de la quiebra, se alzó en los últimos años con las licitaciones para la terminal de combis de Constitución, las mejoras en el paseo del Parque Lezama, y el Metrobus Sur. Todo el dinero de esta operación se depositó en otra cuenta de CEPPA y Goretti, la Nº 052000306221.

El cuatro proyecto 1753/RPC correspondiente a “Producción del libro Buenos Aires Memoria Antigua…”, lo presentó Goretti ante el Consejo el 7 de marzo de 2013, y fue declarado de interés el 30 de octubre. El 30 de diciembre Lombardi autorizó un desembolso de $ 422.027. Todos estos dineros –aportes en el marco de la Ley de Mecenazgo- se depositaron en las cuentas de Goretti, y desde allí fueron girados a la Fundación Pensar. Ledesma también aportó aquí al mecenazgo, con la friolera de $ 422.027, y el monto se depositó en la cuenta Nº 052000322689.

El que debía controlar era socio de los imputados
Un informe de investigaciones preliminares en el marco de la causa muestra un dato que deja en evidencia el vínculo de Mateo Goretti, presidente del CEPPA, con Facundo De Almeida, el vicepresidente del organismo de aplicación de la Ley de Mecenazgo. En síntesis, el que debía que controlar el normal funcionamiento de los planes y el consecuente destino del dinero, era casi un socio de Goretti, imputado junto a Lombardi por lavado de activos.

De Almeida también está apuntado en el pedido de la fiscal Ochoa. La Unidad de Información Financiera (UIF), detalló que De Almeida también ostentaba el cargo de Director del Museo de Arte Precolombino e Indígena de Montevideo, Uruguay, institución fundada y dirigida por el propio Goretti. En síntesis, era a la vez autoridad de aplicación y compartía directorio con quien debía controlar. “En consecuencia, las participaciones de De Almeida en las reuniones del órgano referido se encontrarían específicamente prohibidas por el art. 1 del Código de Ética-Normas de ética prohibiciones e incompatibilidades del Régimen de Promoción Cultural”, concluye el escrito.