El ministro de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios afirmó que el diario “no podrá opacar el esplendor del Centro Cultural Kirchner”.
El ministro de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios, Julio De Vido, afirmó hoy que “todo el odio gorila y antipopular del diario La Nación no podrá opacar el esplendor del Centro Cultural Kirchner ni el protagonismo de la presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, en la política cultural argentina”
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De esta manera el ministro salió al cruce una nota publicada hoy en ese matutino, titulada “El Centro Cultural Kirchner triplicará el gasto previsto” en la que consideró que se ataca sin fundamento al nuevo centro con análisis sesgados, incompletos y malintencionados de información pública que surge del propio presupuesto nacional del que será el mayor emprendimiento de este tipo en América Latina y uno de los principales del mundo.
“La recuperación y refuncionalización del antiguo Palacio de Correos para convertirlo en un centro cultural de excelencia, preservando un edificio de gran valor patrimonial, que por decisión del Congreso Nacional o lleva el nombre de Néstor Kirchner, constituye el nacimiento de un espacio en el que podrán difundirse todas las manifestaciones artísticas y no como dice el diario desde su mirada pequeña, miope y egoísta, que estará abierto a todos los argentinos con un claro sesgo federal e inclusivo, que será un verdadero orgullo para nuestro país”, explicó De Vido.
Asimismo, el ministro resaltó que “sin lugar a dudas el Centro Cultural Kirchner, con 100 mil metros cuadrados, superficie que lo coloca en los primeros planos mundiales, con la increíble sala sinfónica denominada Ballena Azul de 1.800 butacas y una acústica única, la sala de exposiciones colgante La Gran Lámpara o sus numerosos auditorios y espacios para el arte, será el corazón de la cultura y la cultura en toda la región latinoamericana”.
“El planteo del diario La Nación en relación a los costos es absurdo y carente de todo rigor técnico dado que los proyectos de esta magnitud son de ejecución plurianual, tienen actualizaciones y contienen aspectos vinculados con infraestructura, equipamiento y operación preventiva, correctiva y permanente, más aún en una obra que desde el punto de vista de la ingeniería es señera en nuestro país, dado que su proyecto definitivo de fundiciones debieron realizarse importantes modificaciones por el acuífero El Puelche”, señaló el ministro y remarcó que “todas estas variaciones se tramitan mediante expedientes públicos”.
En tal sentido, el ministro recordó que el Centro Cultural Kirchner tiene un costo por metro cuadrado de 2.600 dólares, lo que lo ubica muy debajo de proyectos similares a nivel internacional, como el museo Rijkmuseum en Holanda, finalizado en 2013 que supera los 12 mil dólares, el Museo Munch de Noruega, actualmente en construcción, que alcanza los 15 mil dólares o la Filarmónica de Hamburgo que ronda los 17 mil dólares el metro cuadrado, por citar algunos ejemplos”. En el mismo sentido, De Vido ponderó que los tiempos de ejecución de esta obra iniciada en 2009 son récord para este tipo de proyectos, que en la mayoría de los casos tardan más de 10 años”.
Por otra parte, el ministro recordó que “todo el equipamiento y servicios que menciona el artículo se corresponde con la envergadura de este centro cultural y se adquiere mediante el régimen público de contrataciones de obras públicas y adquisiciones y servicios, todas ellas mediante licitaciones públicas, abiertas y transparentes, cuyos datos pueden consultarse en la página web del ministerio o por exclusividad y remarcó que al igual que en las principales salas del mundo, los pianos son provistos por los fabricantes más prestigiosos, como Steinway y Yamaha y los valores pagados son los que figuran las listas de dichas casas”
Ante la mención a una supuesta compra de obras de arte, el ministro reiteró que se trata de las más de 3 mil horas de contenidos audiovisuales plurales y abiertos como parte de los concursos de fomento que organiza el Gobierno Nacional en el marco del Programa Nacional Igualdad Cultural, que ganaron premios internacionales y pueden consultarse en catalogo.bacua.gob.ar”.
En relación al artículo publicado ayer por Alicia Arteaga en el mismo diario, titulado “El mismo palacio, otro destino”, el ministro recordó que la de idea de hacer un centro cultural con alcance federal y popular fue de Néstor y Cristina, ya que la intención de Lavagna era realizar un simple concurso de ideas para dedicar ese espacio al Bicentenario mientras que el Gobierno Nacional hizo un concurso de proyectos de arquitectura para realizar un complejo cultural de excelencia, que ganó el estudio Bares con la la Sociedad Central de Arquitectos como jurado y agregó: “los comentarios de Arteaga pierden sentido cuando en forma artera, producto de una visión elitista de la cultura ideológicamente opuesta al espíritu inclusivo de este emprendimiento, centra su crítica en analizarlo como si fuera sólo una sala sinfónica y no lo que es, un centro cultural de 100 mil metros cuadrados al que pueden asistir 4 mil personas simultáneamente en 57 salas y salones de exposición, que honra al Bicentenario, además de revalorizar el federalismo y la pluralidad cultural”.
“Desde que empezó esta obra el diario La Nación ha replicado las mismas críticas en un centenar de notas sin ningún aporte constructivo, lo que demuestra una falta de profesionalismo inusitada”, finalizó el ministro.
