El ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, aseguró que la medida de fuerza de ayer manifestó señales de “violencia contra el pueblo”, y sostuvo que las disidencias con la central que conduce Hugo Moyano comienzan “cuando el gobierno profundiza el proceso transformador”.
“La discusión se produce cuando el Gobierno profundiza el proceso transformador, atacando los intereses concentrados en manos de unos pocos, en contra de los intereses del federalismo y de todo el pueblo argentino”, dijo De Vido durante un encuentro que mantuvo con el gobernador de Mendoza, Francisco Pérez, e intendentes comunales de esa provincia.
“Podemos entender que es legítimo el reclamo por el mínimo no imponible y les asiste el derecho a movilizarse, pero no es legítima la violencia contra el pueblo argentino”, añadió el ministro.
En tal sentido, aclaró que “el mínimo no imponible vigente en la Argentina es el menos gravoso de la región, así y todo se movilizaron violentamente contra el pueblo, no contra el Gobierno, por eso las roturas en los comercios de Avenida de Mayo y las interrupciones en todos los accesos a Buenos Aires”.
El jefe de la cartera de Planificación dijo, además, que la “Presidenta (Cristina Fernández de Kirchner) es la única garante para que este proceso continúe”.
También sostuvo que los dólares ahorrados por el Gobierno “con mucho esfuerzo” se aplican al desarrollo de la economía y adelantó que en los “próximos 5 años se invertirán 600.000 millones de pesos” en un plan territorial que priorizará las “obras públicas de infraestructura” en todas las provincias.
“Los manifestantes que marcharon el 8 de noviembre rumbo a Plaza de Mayo no estaban preocupados por el federalismo ni les interesaba saber sobre los recursos destinados a las provincias”, señaló De Vido.
“El mínimo no imponible vigente en la Argentina es el menos gravoso de la región”
“Nos quieren llevar nuevamente a un proceso de endeudamiento y los dólares que juntamos con tanto esfuerzo los necesitamos para el desarrollo de la economía, por eso en la marcha del 8 de noviembre ningún dirigente político se puso al frente de la convocatoria, simplemente porque no pueden explicarlo”, indicó.
El ministro destacó que si “volviéramos al endeudamiento crónico no tendríamos ninguna forma de planificar, y si no hay planificación no hay federalismo”.
De Vido cuestionó además las críticas vertidas por el titular de la Cámara Argentina de la Construcción, Carlos Wagner, en cuanto a los efectos de las restricciones cambiarias en el mercado inmobiliario.
“La peor performance de las empresas constructoras se registró durante el período de la convertibilidad y también es importante recordar que en el 2003 trabajaban en el sector unos 70.000 empleados contra los 400.000 que lo hacen actualmente”, añadió el ministro.
El jefe de la cartera de Planificación finalmente destacó que se “invertirán 600.000 millones de pesos en los próximos cinco años en el plan de desarrollo territorial”, que prevé la ejecución de un ambicioso plan de obras públicas en todo el territorio nacional, priorizando la llegada de agua potable, la construcción de cloacas y el tratamiento de la basura.