Personal del Comando Radioeléctrico fue hasta la vivienda luego de ser avisado por vecinos que escuchaban los llantos de los niños.
La mujer de 27 años dejó a su hijo de 4 años atado a una silla en la cocina con una bufanda mientras que a la niña de 2, la ató a su cuna con un sweater en el dormitorio.
Ambos niños fueron trasladados a la comisaría para revisación médica.
La madre quedó detenida acusada de abandono de persona, por haber dejado atados a sus dos pequeños hijos en su casa con el horno de la cocina encendido, informaron fuentes policiales.
Tras comprobarse que los niños no presentaban ningún tipo de lesiones la policía los entregó al padre y dio intervención a un Tribunal de Familia.