Profesionales de las direcciones de Vacunas y de VIH, TBC y Lepra abandonan sus cargos en rechazo a los recortes en salud pública. Alertan sobre el impacto sanitario y económico de las medidas del Gobierno, en medio de un brote de dos enfermedades altamente contagiosas como el sarampión, que ya estaba erradicado en el país, y de hepatitis A. «No vamos a ser parte de un Ministerio en el que los programas esenciales no pueden dar respuesta a las obligaciones básicas que marca la Ley», señalaron
Un grupo de médicas y médicos pertenecientes a las direcciones de Vacunas y de VIH, TBC y Lepra del Ministerio de Salud presentó su renuncia en rechazo al grave desmantelamiento de sus áreas que denuncian. A través de un comunicado, expresaron su profunda preocupación por las consecuencias que esta situación tendrá sobre la salud pública y el impacto económico a mediano y largo plazo para los ciudadanos.
Los profesionales denunciaron recortes significativos en equipos técnicos altamente calificados, con reducciones del 40% en el área de VIH y del 30% en el equipo de Vacunas. También señalaron la disolución de las coordinaciones de Hepatitis Virales y Tuberculosis en un contexto alarmante de aumento de casos y brotes activos de enfermedades como sarampión y hepatitis A.

En el comunicado, los médicos manifestaron que la prevención es una herramienta esencial para evitar enfermedades, reducir complicaciones y salvar vidas, además de disminuir costos en el sistema de salud. Sin embargo, advirtieron que las actuales decisiones gubernamentales priorizan ajustes presupuestarios de corto plazo sin considerar las graves consecuencias sanitarias y económicas que pueden derivarse de estas políticas.
«No vamos a ser parte de un Ministerio en el que los programas esenciales no pueden dar respuesta a las obligaciones básicas que marca la Ley», señalaron, definiendo su renuncia como un acto de ética médica y responsabilidad profesional. Además, subrayaron que la salud pública no debe ser vista como un gasto, sino como una inversión en el bienestar de toda la sociedad.
Los brotes
El sarampión es una enfermedad extremadamente contagiosa por lo que los cuatro casos registrados entre el 2024 y 2025 alertaron a los expertos. Actualmente no tiene cura, la única defensa es la vacunación generalizada, método que había logrado la erradicación del virus en Argentina. De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, uno de cada diez niños con sarampión sufre una infección de oídos, la cual puede causar sordera permanente. Uno de cada veinte niños con sarampión desarrolla neumonía y uno de cada mil desarrolla encefalitis, una inflamación del cerebro que puede generar daño cerebral.
Por su parte, la hepatitis A, es una infección hepática que también es sumamente contagiosa causada por un virus que causa inflamación del hígado y afecta su funcionamiento. Mientras en años anteriores, se registraban alrededor de 30 casos, en el 2024 se registraron 69 casos, que afectaron especialmente a varones. La forma de prevenir el contagio es la higiene personal, el cuidado de las medidas sanitarias en alimentos, la protección de barrera en relaciones sexuales y la vacunación. La infección tiene tratamiento.
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