El juez federal, Daniel Rafecas
POR: C.R.
Son seis militares y cuatro policías. Se los acusa de operar en centros clandestinos del Conurbano Bonaerense, en la Subzona 16, a cargo de la Fuerza Aérea
Los delitos de lesa humanidad cometidos en la dictadura por la Fuerza Aérea en la llamada Subzona 16, en el oeste del Conurbano Bonaerense, al fin podrán tener una condena, como resultado de la elevación a juicio oral y público del expediente donde se investiga el secuestro y las torturas sufridas por unas 100 personas en los partidos de Merlo, Moreno y Morón, entre marzo de 1976 y enero de 1979.
Cuando comience este juicio, por el banquillo de los acusados pasarán diez ex represores a quienes el juez federal Daniel Rafecas responsabiliza de haber integrado el circuito represivo que en la provincia de Buenos Aires desplegó la Fuerza Aérea, por entonces bajo el mando del brigadier Orlando Ramón Agosti, fallecido en 1997.
En esa red de centros clandestinos de detención manejados por los pilotos figuraron, entre otros, los “chupaderos” conocidos como Mansión Seré, Primera Brigada Aérea de Palomar, Séptima Brigada Aérea de Morón, y las comisarías de Castelar, Haedo y Morón.
Para Rafecas, en la pesquisa que llevó adelante, quedó probada la intervención de los imputados en la privación ilegal de la libertad y la aplicación de torturas a 95 personas, así como en el homicidio de la pareja integrada por Oscar Varela y Elsa Ramona Radisic. En su escrito, el juez detalló que, además de padecer tormentos, los detenidos vivían en “condiciones de existencia inhumanas y degradantes, tales como el tabicamiento, la sujeción e inmovilización, la exposición a desnudez, las constantes amenazas.” Por otra parte, en el expediente también “se verificó el sometimiento en el caso de 14 personas, –12 de ellas mujeres–, a torturas de carácter sexual, signadas por violencia de género.” De hecho, el magistrado concluyó que estas prácticas eran moneda corriente en el manual del verdugo usado por los pilotos de Agosti: desde manoseos y violaciones hasta “el sometimiento de algunos detenidos a mantener relaciones sexuales entre ellos”.
Por estos hechos terribles serán enjuiciados el entonces jefe del Comando de Operaciones Aéreas y segundo de la Fuerza, brigadier mayor (RE) Miguel Ángel Ossés; los brigadieres mayores Hipólito Rafael Mariani y César Miguel Comes, responsables directos de la Subzona 16; los cabos primeros Daniel Alfredo Scali y Marcelo Eduardo Barberiso, y el suboficial auxiliar Carlos Alfredo Cámara. A estos últimos tres represores, que actuaban con alias, se los señala como integrantes del grupo de tareas que secuestraba a quienes luego serían recluidos y sometidos a sesiones de picana y otros vejámenes en la Mansión Seré.
También irán a juicio los ex comisarios de la Policía Bonaerense Alberto Oscar Lanas, que estuvo al frente de la Seccional de Haedo, y su sucesor, Néstor Rubén Oubiña. A ambos se los responsabiliza por la privación de la libertad de personas que pasaron por esa comisaría y la tortura de una de ellas. La lista se completa con el suboficial Felipe Ramón Sosa, al que se le imputa la aplicación de tormentos en la comisaría de Castelar, y el cabo Héctor Oscar Seisdedos, que luego fue agente de la Fuerza Aérea y está acusado por la privación de la libertad de 27 personas y la aplicación de tormentos a 18 de ellas.
Esta causa se suma a otras que integran la del Primer Cuerpo del Ejército y que ya fueron elevadas a juicio por Rafecas: las correspondientes a “Atlético-Banco-Olimpo”, “Vesubio”, “Automotores Orletti”, “Hospital Posadas”, “Imputación a Jorge Rafael Videla”, “Sheraton” y “Masacre de Fátima”. <
