Dirigente moyanista renuncia tras la brutal agresión en el Puente Avellaneda

El secretario general del gremio de los portuarios, Juan Corvalán, anunció que presentará su dimisión luego de que trabajadores de su gremio tiraran a un hombre por el puente en medio de una protesta.

El secretario general del Sindicato Unidos Portuarios Argentinos (SUPA), el moyanista Juan Corvalán, anunció que renunciará luego de que esta mañana trabajadores de su gremio tiraran a un hombre del Puente Avellaneda en medio de una protesta que protagonizaban.

“No quiero saber más nada con esto. Renuncio como secretario general. No quiero hacer otro corte mañana y lastimar gente para recuperar lo que Ministerio de Trabajo nos saca”, adelantó Corvalán en declaraciones a radio Buenos Aires.

El incidente se registró a las 7.45 cuando un motociclista intentó atravesar la protesta de los trabajadores portuarios a bordo de su vehículo, en el que llevaba a su novia. Los trabajadores lo agredieron a golpes y en el tumulto, lo tiraron del puente. Fueron los mismos manifestantes los que fueron a buscarlo y lo levantaron del piso. Según pudo verse en las imágenes televisivas, una de las piernas de la víctima parecía fracturada ya que se doblaba por demás y el hombre no podía controlarla.

“Para que te escuchen, tenés que cortar y molestar a la gente. Si el sistema gremial es esto, yo no estoy”

“No me gustó nada lo que pasó. No estoy de acuerdo y mandé a levantar todo. No quiero un sindicato para hacer esas cosas”, señaló el gremialista, integrante de la CGT opositora de Hugo Moyano. Y agregó: “Está bien que tenemos que mostrar nuestra fuerza y hacer disturbios para que el Ministerio defina lo que tiene definir, pero no me gusta para nada. Lamento lo que le pasó a esa pareja. Lo que gano en puestos de trabajo, me lo saca el Ministerio. No quiero que la desigualdad nos lleve a esto”.

Los portuarios reclamaban en el Puente Avellaneda, que une el sur del conurbano con el barrio porteño de La Boca, que dejen cumplir sus tareas a compañeros que se afiliaron al gremio SUPA desde el Sindicato de Guincheros y Maquinistas de Grúas Móviles.

Aunque aseguró que presentará su dimisión a la comisión directiva del sindicato, Corvalán se atajó al decir que los agresores “no eran los laburantes”. Sin embargo admitió que eran personas ajenas al sindicato que fueron llevadas a la manifestación para hacer bulto. “Tuvimos que traer gente porque teníamos una amenaza de una villa, que la empresa misma son los que banca, tiene un predio en la subida del pueblo, y sabíamos que nos iban a venir a reprimir. No quiero saber más nada con estas luchas”, remarcó.