El concejal del PRO que manejó borracho es dirigente gremial

El concejal del PRO que manejó borracho es dirigente gremial

El PRO obligó a tomarse licencia a Daniel Lewicki, el concejal que manejó borracho y fue detenido en Constitución. Aunque pidió disculpas, al también dirigente del sindicato de Guincheros y delegado de la cartera laboral le bajaron el pulgar.

Daniel Lewicki, edil del bloque Cambiemos en el partido de Avellaneda, deberá pedir licencia a raíz del escándalo en el que quedó envuelto en las últimas horas por protagonizar un episodio policial en el barrio porteño de Constitución cuando lo detuvieron por conducir ebrio.

Tan fuertes fueron las imágenes que indican fuentes del PRO que fue la propia gobernadora María Eugenia Vidal quién ordenó que se lo desvincule del Ministerio de Trabajo, del que era delegado en aquel partido de la zona sur.

Lewicki, además, es secretario gremial y de interior del sindicato de Guincheros y Maquinistas de Grúas, lugar desde donde saltó a la política hace unos años.

Ahora, sus pares definieron este lunes tras una larga reunión que lo obligarán a tomarse “licencia por tiempo indeterminado” del bloque del que forma parte, confirmó ayer al portal LaPolíticaOnline el concejal Sebastián Vinagre, presidente de esa bancada.

Los macristas debieron organizar esa reunión de urgencia para definir un accionar. Se especuló con la opción de que Lewicki renunciara, pero resolvieron forzarlo a pedir una licencia, aún a pesar de que lo reemplazará alguien del Frente Renovador, fuerza por la que Lewicki había sido electo y abandonó a días de asumir.

Lewicki ya fue notificado por sus pares. Con su salida por tiempo indeterminado, el bloque de Cambiemos quedaría sólo conformado por dos concejales, Vinagre y Diego Adrián Malito. El macrismo pierde así peso en Avellaneda, donde tiene otros dos espacios que le responden: el monobloque PRO, de Roberto García, y el monobloque Radicales en Cambiemos, que conforma Susana Mabel Marco Romero.

Desde el macrismo enseguida intentaron despegarse de él. Es que el bochorno de Lewicki generó caos en las ya golpeadas filas del PRO de Avellaneda. Desde el entorno de la diputada nacional y referente del macrismo en ese municipio, Gladys González, se encargaron de enfatizar que el edil “no responde” a la legisladora y “no tienen vínculo”. Aunque algunos señalaron que se trataba de un asesor cercana a la actual interventora del SOMU.