Al abrir el plenario, la presidenta de la comisión de Trabajo y Previsión, la macrista cordobesa Carmen Álvarez Rivero, explicó que el objetivo era dictaminar la semana próxima y llegar al recinto el 15 de agosto, lo que disparó el primer encontronazo con la oposición. El jefe del interbloque de Unión por la Patria, José Mayans, salió al cruce: recordó que en la última sesión pidieron el tratamiento sobre tablas porque “la prioridad (de los jubilados) es urgente”, y consideró que el cronograma propuesto “es una forma de dilatar el tratamiento”. El formoseño acusó al Gobierno de tener como prioridad, en cambio, al “mentiroso superávit fiscal”. Desafió entonces a “si hace falta hacer la sesión el jueves y tratarlo sobre tablas”, porque “con esta dilación nos vamos a octubre”, en referencia a cuándo la clase pasiva podría acceder a la recomposición que se propone. “No sé si están esperando que se muera una cantidad importante de jubilados para llegar al déficit cero”, lanzó e insistió: “Instamos a hacer sesión si es posible mañana mismo”.

El libertario jujeño Ezequiel Atauche, que preside la comisión de Presupuesto que completa el plenario, quiso entonces adelantar las modificaciones que el oficialismo buscará introducir a la media sanción de Diputados, y provocó la reacción de Juliana Di Tullio (UP-UC). La senadora bonaerense reclamó que primero se escuche a los expositores y que lo que pensaba adelantar Atauche se discuta a la hora de emitir dictamen.

El primer expositor fue Guberman. El secretario de Hacienda se encargó de dejar en claro que “no entraría en la discusión de la canasta de jubilados ni en la equidad de las medidas sino en le déficit fiscal”. “Voy a ir a cuestiones concretas –continuó– que tienen que ver el impacto del proyecto en las cuentas públicas como vino de Diputados. Es cierto que un objetivo importante del Gobierno es tener equilibrio fiscal este año y hacia delante, en la manera de lo posible”.

“Este año no hay otra posibilidad, porque no hay ninguna forma de financiamiento para el Gobierno, que no sea la recaudación de impuestos”, insistió Guberman. “Ese equilibrio fiscal se sustenta en una serie de medidas de cuidado de los sectores más vulnerables”, intentó justificarse sin datos que avalaran sus argumentos.

Para el subordinado de Caputo, el resultado del proyecto que salió de Diputados les “genera cierta preocupación porque hay una serie de artículos que tienen un impacto fiscal importante en términos del Presupuesto nacional”.

La media sanción de la Cámara baja contempla una recomposición del 8 por ciento de los haberes previsionales que Milei podó a los jubilados sobre la inflación de enero y un adicional anual del 50 por ciento de la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores (RIPTE), en el hipotético caso que los salario le ganaran a la inflación. Según la Oficina de Presupuesto del Congreso, el costo fiscal del proyecto alcanza a apenas el 0,43 por ciento del PBI.

Para Guberman, “sumado todo el proyecto, estamos hablando que, tanto este año como el próximo, las cuentas públicas cerrarían en déficit de 1 punto; el año próximo quedaría 1,2 por ciento de más gasto” y agregó: “En un contexto, insisto, en que no tenemos acceso a financiamiento para sostener el déficit. Sumado a que el año que viene vamos a tener menos recursos disponibles porque no vamos a tener el impuesto País”.

A la hora de las preguntas, el funcionario también echó mano a los argumentos de sus jefes libertarios. Mayans lo consultó cuándo es la deuda acumulada por el Gobierno nacional con las cajas previsionales de las provincias que no fueron trasferidas al Estado Nacional. “No hay un número porque no está claro que la nación le deba a las provincias. De 4 auditorías, una sola coincide con el reclamo. Las otras son deudoras de la nación porque se le transferido de mas y otros casos es mucho menos que lo que las provincias reclamaban. Sin resultados de las auditorías no vamos a transferir fondos públicos”, respondió Guberman.

La exposición de De los Heros fue en la misma línea discursiva. “El Gobierno nacional partió de un déficit fiscal enorme, pero algo que yo no escuché durante las exposiciones que el déficit fiscal tiene una contrapartida que es la inflación que sufrió el los últimos años el país. Fue lo que deterioró e hizo caer en más del 40 por ciento el poder adquisitivo de los jubilados”, cargó el titular de la Anses. “Cuando el secretario de Hacienda habla del equilibrio fiscal nos estamos refiriendo es a la sostenibilidad de mantener dominada y controlada la inflación, que es un cáncer a lo que los argentinos llegamos a acostumbrarnos, pero que nos ha hecho mucho daño”, insistió.

Según De los Heros, el accionar del Palacio de Hacienda con el DNU fue el de restablecer “el concepto de movilidad” y sumó: “No pretende recuperar o reestablecer la justicia en la que incurrieron anteriores gobiernos. Eso deberá ser motivo no de una ley de movilidad, sino de una ley de recuperación”. Con lo que dejó en claro que la movilidad libertaria no busca recuperar las jubilaciones.

 

En el final, De los Heros fue más claro que Guberman y admitió que Economía está “dispuesto a cubrir la inflación de enero”, aunque con otra trampa a la vista: “Creemos que no debería ser con efecto retroactivo, sino a partir de agosto. Esto es una verdadera recuperación y es lo posible”, argumentó el titular de la Anses proponiendo que los jubilados sacrificaran en el camino lo que el Gobierno le podó desde enero hasta julio.