La cooperativa Cueroflex emplea a 80 trabajadores y su continuidad está en duda. El tarifazo hizo que recibiera una factura de luz de más de 800 mil pesos que los deja al borde de la quiebra.
La cooperativa textil Cueroflex es un caso testigo del impacto devastador de los tarifazos en los sectores productivos. Mucho más en aquellos autogestionados que hacen importantes esfuerzos para sostener los empleos.
Cueroflex se ocupa de trabajar con cuero reconstituido y en ella tienen empleo 80 cooperativistas. Pero su continuidad está en duda. Es que el aumento de las tarifas la podría llevar a la quebra debido a que le llegó un factura de luz que supera los 800 mil pesos.
“En enero pagamos 47 mil pesos y es el mes de más consumo”, dijo el Presidente de la Cooperativa Jorge Reisch. Además relató que las empresas “a pesar del amparo que existe en la provincia, no retrotrajeron los precios al mes de abril, como se había anunciado”.
La cooperativa que se encuentra en San Martin, recibió una factura que asciende a $861.351 pesos y los deja tambaleando. “Estamos desesperados, de esta cooperativa dependen 80 familias”.
CueroFlex es una una fábrica recuperada desde el año 2012, y es el sostén de muchas familias. Es la única fábrica de cuero restituido en Latinoamérica que realiza un proceso de reciclaje del cuero.
Reish contó que “Nosotros pagábamos 60 mil pesos de luz mensual cuando teníamos subsidio, luego nos vinieron facturas de 320 mil pesos, y ahora esto que es una locura”, concluyó.