Elaskar y Fariña declararon ante la justicia

El financista Federico Elaskar declaró este lunes en la Justicia que hubo “una operación de Jorge Lanata para voltear el Gobierno”.

Así lo informó el abogado de Elaskar, José Manuel Ubeira, tras la declaración de su cliente ante el juez Sebastián Casanello y el fiscal Guillermo Marijuán en la causa por presunto lavado de dinero donde está imputado el empresario Lázaro Báez.

Elaskar desmintió el contenido del programa donde se lo ve hablando de presuntas maniobras ilegales y dijo que hizo eso para “recuperar lo que le debían de la venta de la financiera SGI y porque a Lanata le servía para su programa y para pegarle al Gobierno”, añadió.

Hubo una operación de Jorge Lanata para voltear el Gobierno

Los dichos de Elaskar ante la Justicia, dijo el letrado, tuvieron como fin demostrar que “fue una operación de Lanata para voltear al Gobierno”.

Ante los periodistas, el financista dijo que “no conozco a Lázaro Báez, ni a su familia, y con (el contador Leonardo) Fariña (otro de los que reveló esas maniobras) no hice ninguna operación, solamente me acercó a los compradores de SGI”.

Por su parte, el contador Leandro Fariña, que también declaró este lunes, afirmó que conoce al empresario Lázaro Báez y que por pedido de éste compró campos en Mendoza y reiteró que sabía que el periodista Jorge Lanata tenía encendida una cámara oculta durante una charla que mantuvieron y en la reveló operaciones presuntamente ilegales, según fuentes judiciales.

“Respondí todas las preguntas del juez (Sebastián Casanello) y el fiscal (Guillermo Marijuán), y amplié todo lo que quise. Pero no puedo dar detalles” de lo dicho, comentó Fariña a la prensa al terminar su testimonio, que se extendió durante doce horas. Sin embargo, admitió que conoce a Báez y que a pedido suyo compró campos en Mendoza.

Fariña negó que haya realizado para el mencionado empresario operaciones en Uruguay, y desestimó la realización de viajes al exterior y a la provincia de Santa Cruz con el objetivo de trasladar dinero en bolsos.

Fariña, por su parte, dijo que trabajó “como auditor” en la empresa Austral Construcciones, que es propiedad de Báez, y también bajo las órdenes del empresario Carlos Molinari, que a cambio le pagaba un salario de 70 mil pesos mensuales.