Hugo Yasky realizó un balance de la histórica jornada del viernes, y proyectó la continuidad de la lucha sindical. “La Marcha Federal vino a cumplir un vacío de representación del conflicto social”, sostuvo.
En una entrevista realizada a Página/12, el Secretario General de la CTA de los Trabajadores, a quien le tocó cerrar el acto del viernes pasado, comentó la movilización, consideró su impacto y habló de cómo sigue el panorama.
En comparación con lo que fue la primera Marcha Federal de julio de 1994 durante el primer mandato de Carlos Menem, Yasky consideró que hubo muchas diferencias. “La más visible es la masividad de la convocatoria. La del viernes por lo menos cuadruplicó a la de aquel julio de 1994”, sostuvo el docente.
“Y tiene que ver con que a mediados de los 90 el movimiento sindical estaba deflecado, estaba debilitado, se había producido ya la defección de muchos dirigentes sindicales que habían sido parte del festín de las privatizaciones; veníamos de un proceso de destrucción sistemática del empleo y la desocupación que ya entonces tenía niveles muy altos”, prosiguió.
En contraste, “hoy venimos de un período de casi 13 años de crecimiento del movimiento sindical porque creció el empleo y de avances en derechos de los trabajadores”, afirmó Yasky.
Con respecto a la unidad sindical, el dirigente se refirió al proceso de reunificación de las CTA y a la “unidad en la acción” con la CGT. Respecto al primero afirmó que “es un proceso que está en marcha y que en el correr de este año va a seguir avanzando”.
Respecto a lo segundo reflexionó: “La unidad en la acción va a depender de cómo se resuelva el conflicto interno que existe en la CGT, en la que hoy persiste un sector que trata de neutralizar el posicionamiento del movimiento obrero y la confrontación contra el ajuste. Pero soy optimista respecto de la señal que significa la presencia de muchos gremios y dirigentes de la CGT en los actos previos de la Marcha Federal y en la propia Plaza de Mayo, como Pablo Moyano o Sergio Palazzo. Hay un contraste entre las bases y lo que sucede en las cúpulas de la CGT”.
Por último, respecto al próximo objetivo, que es el paro nacional, Yasky admitió que “tiene que tener la masividad que solamente le pueden asegurar una convocatoria unificada de todas las centrales”.