Política/Internacional
El expresidente de Bolivia aterrizó pasadas las 14.10 y agradeció a López Obrador: “Me salvó la vida”.
El expresidente de Bolivia Evo Morales llegó pasadas las 14.10 (hora argentina) a México tras un sinuoso periplo y le agradeció a Andrés López Obrador. Dijo que le “salvó” la vida y que “seguirá” en la lucha.
En compañía de su otrora vicepresidente, Álvaro García Linera, Morales aterrizó en el aeropuerto de Ciudad de México con el avión de la Fuerza Aérea enviado por Andrés López Obrador, quien le garantizó asilo político. Allí fue recibido por el canciller Marcelo Ebrard.
Hermanas y hermanos, parto rumbo a México, agradecido por el desprendimiento del gobierno de ese pueblo hermano que nos brindó asilo para cuidar nuestra vida. Me duele abandonar el país por razones políticas, pero siempre estaré pendiente. Pronto volveré con más fuerza y energía.
Muy agradecido con el hermano Manuel López Obrador y el gobierno y pueblo de México por salvarme la vida. Llegamos sanos y salvos junto a nuestros hermanos Álvaro y Gabriela. Los golpistas ofrecieron $us 50 mil a un miembro de seguridad para que me entregue antes de mi renuncia.
Luego, continuó: “Para que no haya más hechos de sangre, más enfrentamientos, hemos decidido renunciar. El presidente de México me salvó la vida. Estamos muy agradecidos, hermano canciller, muchas gracias por salvarnos la vida”.
Morales también les dedicó un mensaje a los movimientos sociales de su tierra: “Quiero decirles a todos los movimientos sociales y militantes que son parte del proceso de liberación, sean obreros, campesinos o servidores, algunos ministros… Pero también quiero decirles que mientras tenga vida, seguimos en política. Mientras tenga vida, sigue la lucha”.
“Pensé que habíamos terminado con la opresión y la discriminación, la humillación. Pero surgen otros grupos que no respetan la vida, menos a la patria”, añadió. Y apuntó: “Si algo de delito tengo, es que es indígena Evo… No por este golpe voy a cambiar ideológicamente”.
El viaje a México tuvo complicaciones diplomáticas de todo tipo. La seguidilla comenzó cuando el avión aterrizó el lunes en Lima, donde tuvo que esperar las autorizaciones correspondientes para seguir su camino a Bolivia a recoger a Morales.
El canciller mexicano Marcelo Ebrard contó que desde Bolivia le negaron el permiso en un un primer momento, por lo que la tripulación tuvo que regresar a Perú.
Destrabado este primer imprevisto, el regreso -con Evo a bordo- también fue complicado. El Gobierno peruano decidió entonces suspender el permiso para bajar en Lima. “Fue muy difícil y muy tenso porque en el aeropuerto donde estaba Evo ya había seguidores y simpatizantes de él alrededor del aeropuerto. Y adentro estaban las Fuerzas Armadas de Bolivia”, dijo Ebrard.
Así, la aeronave hizo escala en Paraguay. Y desde allí partió hacia México, aunque sin poder sobrevolar nuevamente el espacio aéreo de Bolivia ni tampoco el de Ecuador en caso de que tuviera que cargar combustible. Tuvieron que gestionar permisos con Brasil también.
“Hubo que rodear Ecuador porque ya estando en vuelo les dijeron que no les permitían sobrevolar el espacio aéreo y que lo iban a revisar, entonces hubo que rodear y entrar a aguas internacionales”, aseguró Ebrard.
Luego de que Andrés López Obrador dijera sentirse “orgulloso” de encabezar un gobierno que garantice “el derecho de asilo”, Ebrard aseguró que no hay razón para que el asunto “confronte” a los gobiernos de la región, y descartó la posibilidad de que Estados Unidos reclame a México por el otorgamiento del asilo al mandatario.
Fuente: Clarín