“El trabajo no es Ganancia”, es el eslogan de los nuevos spots del diputado del interbloque UNA, Facundo Moyano, que buscan modificar la cuarta categoría del Impuesto, y que interpela directamente al Presidente de la Nación.

El diputado y sindicalista arremetió una vez más con el consabido impuesto que arrastra polémicas y reclamos desde el gobierno anterior, pero que inició capítulos propios bajo la gestión de Cambiemos al frente del gobierno nacional.

Efectivamente, en uno de los spots, se acusa de manera directa aunque moderada a Mauricio Macri, recordando su promesa de campaña de eliminar dicha tributación a los trabajadores, mientras las imágenes reproducen el spot proselitista en cuestión.

Tras repasar la quita de retenciones a los sectores mineros y la ley para el pago a los fondos buitres, el locutor dice: “Es hora entonces que el macrismo trate con la misma urgencia temas que afectan a la sociedad como la inflación, Ganancias y el 82% móvil. En campaña Macri decía que eliminaría Ganancias para los trabajadores y ahora que son gobierno más trabajadores ingresaron al tributo”.

En cuanto a la propuesta del Frente renovador que difunde el spot, se trata de un nuevo proyecto de ley, que apunte a modificar el impuesto y elevar el mínimo no imponible de los 30.000 pesos actuales a $ 62.300.

“Hace años venimos insistiendo con la modificación del Impuesto a las Ganancias. Es hora de encontrar una solución”, sostiene la voz en off en el video. Y subraya que el proyecto incorpora “una serie de modificaciones para proteger al trabajador y al mismo tiempo no desfinanciar al Estado. De esta manera, pretendemos lograr una estructura tributaria más justa y progresiva”.

Además de la elevación del tope, la iniciativa plantea la actualización automática para evitar la discrecionalidad y la utilización política por parte del Ejecutivo en función de sus necesidades fiscales o el calendario electoral; la posibilidad de deducir el alquiler, los créditos hipotecarios, las cargas familiares, la cobertura médica, los gastos por guardería y prescolaridad; excluir del impuesto las horas extras, los feriados obligatorios y días no laborables, los adicionales por productividad, los viáticos, comida, entre otros; y aumentar las tasas del sector minero y de los juegos de azar para no desfinanciar al Estado.