(Por Pablo Maradei) En las exposiciones de los tres dirigentes sindicales de la CGT sobrevoló la cabal convicción de que el Gobierno de Javier Milei tiene todos los condimentos de ser una Dictadura.
En la CGT el clima cambió: el disparador fue la marcha de los jubilados del 12 de marzo pasado y la feroz represión que llevó adelante el Gobierno nacional. Como contó InfoGremiales, el discurso de Héctor Daer fue muy fuerte, algo en lo que no suele destacarse por su espíritu dialoguista (Ver nota principal). Previo a su cierre brindaron sus respectivos discuros su co-equiper en el triunvirato, el camionero Octavio Argüello, y la judicial Maia Volconvinsky, quien junto a Julio Piumato, son los encargados de la secretaría de Derechos Humanos de la Central Obrera y quienes promovieron este acto en la previa al 24 de marzo.
Acá los párrafos más destacados de Volcovinsky, quien quedó a cargo de la mesa sindical de Derechos Humanos de la CGT: «Estamos decididos a trabajar en mostrar la historia de lucha del movimiento obrero durante la Dictadura; en constituir nuestros propios espacios de Memoria del movimiento obrero que entregó la vida de secretarios generales y dirigentes». Agregó: «Yo les pido colaboración porque eso es lo que nos dará la fortaleza para transitar el camino con una mirada trascendente, que no es solamente las pequeñas batallas que estamos librando cada día; es una batalla de décadas que estamos llevando los argentinos que en algún momento nos va a ver con la victoria definitiva».

Siguió: «La Dictadura vino a instalar un modelo económico de hambre, de pobreza, de destrucción de la industria, de apertura indiscriminada de las importaciones; igualito a como se está profundizando ahora con este Gobierno, también de timba financiera. Eso no había existido en la Argentina ni en el mundo. Pero acá para instaurar ahora este modelo luego de 40 años de democracia en el que nos costó mucho superar esa Dictadura. Y hay muchas espinas que no pudimos sacarnos como la ley de Entidades Financieras o la Carta Orgánica del Banco Central; los recortes que sufrió la ley de Contrato de Trabajo. Tuvimos muchos progresos pero nunca nos pudimos sacar de encima cosas que instaló la Dictadura y para eso hizo lo que hizo: aniquilar a toda una generación de luchadores, de dirigentes sindicales, sociales, políticos, estudiantiles».
Completó: «Entonces la reflexión sobre ese día, sobre ese punto de partida de hace 50 años nos ubica a nosotros en la lucha que estamos dando. Nos da fuerza y nos hace conscientes de lo que estamos peleando porque cada lucha que nosotros estamos dando por nuestro salario y por nuestras condiciones de trabajo y de vida es que estamos dando aquella lucha grande. Solos no la podemos dar, pero de esta forma sí la podemos dar: por eso es importante la contundencia que va a tener este 24 por la unidad que consiguieron los compañeros para marchar y el plan de lucha que está anunciando la CGT»
Luego de Volconvinsky y previo al cierre de Daer habló Argüello. Dijo entre otras que «estamos ante un Gobierno negacionista que no reconoce la historia y yo creo que si no se reconoce yo creo que no puede construir futuro. Por eso este Gobierno no nos puede llevar a otra cosa que a un desastre; desastre económico, social y político. Y para eso estamos nosotros, para defender los derechos y la dignidad de los trabajadores; del pueblo en su conjunto. Cuando escuchamos al Gobierno vemos que nos quiere llevar al 1800; época infame donde el trabajador no tenía ningún derecho y era explotado. Más adelante vienen épocas de alegría donde se consiguen derechos; y es por eso que los vamos a seguir defendiendo». Siguió: «Es muy importante que el 24 estemos todos unidos porque será la única manera de enfrentar esto que hay que es un gobierno con un modelo nefasto que lo que quiere no es solo la destrucción del pueblo, sino también de la Patria. Hoy más que nunca la Patria corre peligro porque vienen por todo sin ningún miramiento». Cerró: «Cuando yo escucho que lo primero que dicen de que al fotógrafo que balearon era militante, yo digo que soy orgullosamente militante porque para ser militante hay que tener amor por el pueblo, por el prójimo; algo de lo que ellos no saben nada».
Cerró llamando a la lucha «porque será muy profunda» y «para eso hay que estar unidos, porque el pueblo unido jamás será vencido».
INFOGREMIALES