El Sindicato de Conductores y Motoristas Navales (Siconara) y su obra social (Osconara) reclamaron hoy a la Cámara Argentina Patagónica de Industrias Pesqueras (Capip) el libre acceso a la red wi-fi en los buques para acceder a la atención médica.
Los titulares del gremio y de la obra social sindical, Armando Alessi y Mariano Vilar, respectivamente, solicitaron una urgente reunión a la Capip para garantizar el acceso a la red wi-fi de los tripulantes de buques a fin de que accedan a la atención de la salud.
Los dirigentes extendieron el reclamo a la totalidad de las cámaras patronales del sector de la pesca, y señalaron que implementar la telemedicina es «humanitario».
«Se trata de preservar la salud y atención médica de forma responsable de los trabajadores marítimos, porque lograr una cobertura de salud universal, incluso en ultramar, es vital para cualquier embarcado», destacó Vilar en el documento.
El gremio defendió en un escrito enviado a las cámaras «esa posibilidad para los casos de seguimiento de patologías crónicas, emergencia y asistencia en salud mental a través de la implementación y desarrollo de la telemedicina» y dijo que redundará en un mejor desempeño de los embarcados, que no deberán interrumpir los tratamientos.
El reclamo fue presentado por escrito a la Capip y a las Cámaras de Armadores Poteros Argentinos (CAPA), de la Industria Pesquera Argentina (Caipa), Argentina Langostinera Patagónica (Calapa) y de Armadores Pesqueros y Congeladores de la Argentina (Capeca), al Consejo de Empresas Pesqueras de Argentina (CEPA) y a la Asociación de Embarcaciones de Pesca Costera y Fresquera.
«El objetivo es habilitar al personal embarcado a tener libre acceso a internet para disponer de la cobertura médica a distancia, respaldada por la obra social», afirmaron.
Los dirigentes explicaron que la solicitud se respalda en la experiencia mundial por la pandemia de la Covid-19, que provocó que la Organización Marítima Internacional (OMI) recomendase a los Estados miembro aplicar la telemedicina para ofrecer asistencia desde tierra a los buques que naveguen aguas nacionales.
Esa obligación alcanza al estado de pabellón y al armador para ofrecer asistencia oportuna a la tripulación afectada, lo que luego promovió la intervención de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la Federación Internacional de Trabajadores del Transporte (ITF) y la Cámara Naviera Internacional (ICS).
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