La crisis del massismo equivale a una pérdida de casi 600 mil votos

La salida de intendentes clave de la Primera y Tercera sección electoral debilita al renovador en el principal distrito electoral del país. La cifra surge de estimar los sufragios obtenidos en los municipios donde sus referentes, hoy alejados del FR, le aseguraron el triunfo en las legislativas de 2013. La presión de De Narváez por que vaya a una “gran interna opositora”.

La crisis del massismo equivale a una pérdida de casi 600 mil votos

La crisis del massismo equivale a una pérdida de casi 600 mil votos

No pasa nada/Si todos los traidores se van con Massa”. El hit que acompañó las movilizaciones de La Cámpora desde la victoria del ex intendente de Tigre en las elecciones legislativas de 2013 en la provincia de Buenos Aires aparece hoy como una profecía cumplida que dibuja una mueca sonriente en el rostro de los militantes kirchneristas.

La estampida de dirigentes del Frente Renovador (FR) hacia el PRO o el Frente para la Victoria (FPV) tuvo su pico más alto la última semana. Según consignó Tiempo Argentino, el primer golpe llegó desde Almirante Brown. El ex intendente de ese municipio y ex jefe de bloque del FR en la Cámara de Diputados, Darío Giustozzi, no sólo dio un portazo sino que aseguró que en caso de que Massa fuera presidente, el país volaría por el aire. El segundo revés llegó desde la Patagonia. Desde allí Mario Das Neves, candidato a gobernador de Chubut e integrante del interbloque del FR en la Cámara Baja, expresó su deseo de sumarse a la boleta que encabezará Daniel Scioli. Cuando la asimilación de golpes ya parecía compleja, apareció Facundo Moyano y señaló que si bien apoya a Massa como candidato a presidente no pertenece al FR.

A lo largo del derrotero que comenzó a mediados de 2014 también se alejaron el fiscal Pablo Lanusse y el ex diputado Eduardo Amadeo.

En medio de las fugas masivas, el ex jefe de gabinete, Alberto Fernández, también salió a cuestionar a Massa e hizo saber que en la actualidad tan sólo cumple un rol similar al de una “asesor externo”. La frutilla del postre la puso Juan José Álvarez. El ex ministro duhaldista abandonó su rol de jefe de campaña y se alejó definitivamente del espacio que conduce Sergio Massa. El viernes el FR acumuló la última baja de la semana cuando el vicepresidente del Concejo Deliberante de San Martín, Alfredo Buglioni, anunció su regreso al FPV.

Lo cierto es que la sangría del Frente Renovador no comenzó esta semana, sino que simplemente se profundizó. El puntapié inicial lo dio la diputada provincial Nancy Monzón, a fines de 2013. Y luego el diputado provincial Orlando Yans armó su valija en julio del año pasado y dejó el bloque del FR en la legislatura para formar el monobloque Unión PRO. Casi al mismo tiempo, en Morón, el concejal Ramiro Tagliaferro también abandonaba el bloque massista. En 2015, el primero en irse fue el diputado bonaerense Mariano San Pedro, hijo del intendente de Bragado, quien abrevó en el bloque del FPV en la Legislatura provincial. Luego lo siguieron el intendente de Escobar, Sandro Guzmán, y el intendente de San Isidro, Gustavo Posse, que se llevó consigo al intendente de Coronel Pringles Carlos Oreste. Ya en abril, a la nómina se sumó el senador bonaerense Baldomero “Cacho” Álvarez. Lo siguió el senador Alfonso Coll Areco, hoy candidato a intendente en San Miguel por el sciolismo.

A lo largo del derrotero que comenzó a mediados de 2014 también se alejaron el fiscal Pablo Lanusse y el ex diputado Eduardo Amadeo.

El último caso resonante antes de la sangría masiva de esta última semana fue el del intendente de Malvinas Argentinas, Jesús Cariglino, hoy ya alineado con el PRO y el de su hermano, el senador provincial, Roque Cariglino.

Atrás de cada nombre propio hay un territorio, un municipio y una sección electoral. La real dimensión de la devaluación de Sergio Massa como candidato aparece en el análisis territorial. La provincia de Buenos Aires se encuentra dividida en ocho secciones electorales y dos de ellas, la Primera y la Tercera, son las que contienen a los partidos que integran el Conurbano Bonaerense, un conglomerado de 28 municipios que con casi 7 millones y medio de electores representa casi un 27% del padrón nacional y más del 70 % del bonaerense.

La Primera Sección electoral está conformada por Merlo, Moreno, San Martín, Tigre, Tres de Febrero, Malvinas Argentinas, Morón, Pilar, San Isidro, San Miguel, Vicente López, José C. Paz, Escobar, Hurlingham, Ituzaingó y San Fernando. En tanto que la Tercera está compuesta por La Matanza, Lomas de Zamora, Quilmes, Almirante Brown, Lanús, Florencio Varela, Avellaneda, Berazategui, Esteban Echeverría, Presidente Perón y San Vicente.

Tan sólo por poner dos ejemplos que pueden ayudar a mensurar el tamaño de la pérdida en cuanto a capital electoral, hay que decir que en las elecciones de 2013 votaron en la provincia de Buenos Aires 9.404.249 personas, de las cuales 195.844 lo hicieron Malvinas Argentinas y 331.334 en Almirante Brown, es decir un 2,08% y un 3,52% respectivamente, de los votos válidos bonaerenses. En ambos municipios triunfaron por amplio margen las listas del Frente Renovador que respondían a los intendentes Cariglino y Giustozzi. En Almirante Brown, los “renovadores” cosecharon casi el 50% de los votos (148.919) y en Malvinas Argentinas, cerca del 60% (108.588).

El escenario se repite en cada uno de los populosos distritos donde el FR triunfó en 2013 y hoy quedó sin referentes. En San Isidro de la mano de Posse el FR sumó poco más del 57% (114.550); en Escobar 53,7% (61.911), En San Miguel el 53,55% (84.692)  Avellaneda 41,47% (86.460), y Hurlingam, con el apoyo de su ex jefe de campaña Juanjo Álvarez, el 47,3% (51.650). Si se contabilizara numéricamente esta crisis, y asumiendo que el electorado no necesariamente trasvasará su voto de la misma manera, podría estimarse la pérdida de caudal electoral en casi 600 mil votos.

Ante la fuga en distritos claves y la baja cada vez más pronunciada de Sergio Massa en las encuestas, quienes aín están en el FR, y van en busca de cargos ejecutivos en la provincia, comienzan a reclamar “una gran interna opositora” en el principal distrito electoral del país. El portavoz de esta estrategia es Francisco de Narváez, que luego de la sangría se ha convertido en el hombre con mejor proyección en la provincia de Buenos Aires dentro del espacio.

En el interior y la Ciudad de Buenos Aires, el panorama no parece ser mejor para el FR. En CABA no superó las PASO, en Santa Fe no figuró entre las tres fuerzas que disputan poder real, en Mendoza y Salta su presencia electoral pasó inadvertida, al igual que en Neuquén. De cara a lo que viene ya hay dirigentes que de manera unilateral dejan de lado los acuerdos sellados con Massa, como es el caso de los radicales José Cano y Gerardo Morales que, en Tucumán y Jujuy respectivamente, se alejaron para apoyarse en el PRO.

Así, “con la vergüenza de haber sido y el dolor de ya no ser”, Sergio Massa arranca una semana que será clave, en la que deberá decidir el rumbo de su candidatura y del futuro opositor en la provincia de Buenos Aires.

También en las legislaturas

La sangría no sólo se nota en el territorio sino también, como es lógico, repercute en la fuerza parlamentaria del Frente Renovador que ve peligrar su estatus de tercera fuerza en la Cámara de Diputados de la Nación. En el caso de que Mario Das Neves plasme su alejamiento a nivel legislativo, el FR quedará como cuarta fuerza por debajo del PRO ya que no sólo el ex gobernador de Chubut dejaría el bloque sino que también lo haría su compañera de bloque y de terruño Nelly Lagoria.

Por su parte, con las últimas salidas y movimientos, de los 19 integrantes que figuran en la nómina del bloque del Frente Renovador de la Cámara de Senadores bonaerense, sólo quedan quince. En la Cámara Baja bonaerense, la última pérdida computada para el bloque del massismo fue la de Mario Giacobbe. De esta manera el bloque massista de legisladores contará a partir de ahora sólo con 19 miembros.

Pino Solanas no descarta un acuerdo con el ex alcalde de Tigre

El senador nacional por Proyecto Sur y precandidato presidencial Fernando “Pino” Solanas no descartó sellar un acuerdo electoral con el también postulante a la Casa Rosada del Frente Renovador (FR), Sergio Massa, en el marco un “gran espacio” opositor que reúna a todas las expresiones de la “centro izquierda nacional”. “Estoy convocando a la conformación de un espacio plural y progresista con contenidos de la centro izquierda nacional, pero sin ninguna proscripción”, para enfrentar un escenario electoral “polarizado” entre el kirchnerismo y el frente PRO-UCR-Coalición Cívica, dijo Solanas, y ratificó su postulación presidencial de cara a las PASO.

José Eseverri pone en duda la candidatura de Mauricio Macri

El intendente de Olavarría (Frente Renovador), José Eseverri, afirmó que mientras se habla de una posible caída de la candidatura de Sergio Massa, él pone “en duda la candidatura presidencial de Mauricio Macri, porque “no puede hacer pie en la Provincia, donde reside el 40% del electorado”.

Eseverri consideró que el jefe del PRO “no tiene volumen” y que “tuvo su momento mediático pero luego no lo pudo consolidar”. “Sin tener base sólida en donde reside el 40% del electorado, no lo veo con futuro. Macri no puede hacer pie en la Provincia. Tanto hablan de Massa, yo la que pongo en duda es la candidatura de Macri”, opinó.

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