Empresarios y referentes de distintas industrias coincidieron ayer en que la medida de fuerza convocada por la CGT de Hugo Moyano y la CTA de Pablo Micheli provocó “escasos” impactos en el curso de la producción aunque reconocieron que produjo interrupciones significativas en el ingreso y egreso de mercaderías e insumos a las plantas productivas debido a la acción de “piquetes” de camioneros que impidieron la normal circulación de las mercancías.
El paro no tuvo mucho eco en las industrias automotriz, textil y alimenticia, entre otras.
El ausentismo de los trabajadores, según los consultados, se expresó en “bajos porcentajes”, según evaluaron en diálogo con Tiempo Argentino.
Desde la Asociación de Fábricas de Automóviles (ADEFA) afirmaron que la presencia de personal en las fábricas fue “casi perfecta”. En las terminales “hubo ausencia de personal pero fue muy menor, en resumen las actividades se desarrollaron con normalidad”, concedió un vocero de la cámara que nuclea a las terminales automotrices. Según la fuente, el trabajo también fue normal en las administraciones, donde “todos trabajaron” y a su vez “en las plantas, los mecánicos asistieron casi perfectamente”. De acuerdo con lo informado, el panorama se repitió en Fiat, Ford, Peugeot, Toyota y Cytroen.
