La diputada Laura Alonso, que busca liderar la Oficina Anticorrupción, cambió radicalmente de opinión respecto a los decretos. Si hasta hace poco tiempo proponía prohibirlos, ahora su uso para meter dos jueces de la Corte por la ventana le pareció un mecanismo adecuado.
La candidata a ocupar la Oficina Anticorrupción, Laura Alonso, cambió radicalmente su postura acerca de la utilización de Decretos de Necesidad y Urgencia. La principal detractora de este tipo de instrumentos, ahora cambió su forma de pensar y defiende los decretos firmados por el presidente Mauricio Macri.
“Reformularía la Constitución solo para eliminar los DNU y el veto”, afirmó hace cuatro años.
“Explícame cuál es la “necesidad y urgencia” de crear un ministerio por DNU y no por ley del Congreso. Violar la Constitución es progre?”, tuiteó el año pasado.
En 2012, afirmaba: “Estoy en contra de reformar la Constitución, pero con tanto gusto prohibiría los decretos de necesidad urgencia”.
“Para elegir un juez de la Corte, el Senado necesita dos tercios de sus miembros”, enunció en mayo del 2014.
Sin embargo, la diputada Laura Alonso, que busca estar al frente de la Oficina Anticorrupción, cambió radicalmente de opinión a la luz de la conveniencia del momento.
Fue de hecho una de las pocas dirigentes que bancó explícitamente el polémico recurso aplicado por Mauricio Macri para designar, sin el consenso del Congreso, a dos jueces para la Corte Suprema de Justicia Nacional.
El argumento de Alonso para saltear al Poder Legislativo fue el siguiente: “1. La Corte tiene 3 miembros de 5. Está en cuasi-emergencia 2. El Senado está en receso 3. La Constitución prevé procedimiento en este caso.”, y luego agregó: “La Corte ha recibido bien la noticia. Está dentro del marco previsto por la Constitución”.
Una explicación discutible por varios aspectos: por mencionar sólo uno, Macri podría haber convocado sesiones extraordinarias en el Congreso.
Así, a la pasada Laura Alonso evidenció un pacto entre el presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, y el Ejecutivo para saltear al Poder Legislativo.
Por lo demás, ni Poder Ciudadano (ONG presisida por Alonso hasta su salto a la política) avaló el mecanismo usado por Macri.
Ni Ricardo Gil Lavedra ni Julio Cobos, integrantes de la alianza gobernante, pudieron justificar el escandaloso decreto de Macri. Tampoco pudo hacerlo Daniel Sabsay, constitucionalista que admitió haber votado a Macri; hasta Carlos Maslatón, otrora ligado a Patricia Bullrich habló de “dictadura”.
“Es un error grave y sienta un precedente funesto”, lanzó Gil Lavedra sin eufemismos.
