En la tarde de ayer dirigentes de diferentes organizaciones se reunieron y analizaron la coyuntura actual. Se reforzó el espacio multisectorial y ya proyectan futuras medidas de fuerza.
Tras el histórico cónclave entre organizaciones de trabajadores informales y desocupados y la CGT, el encuentro comenzó a desvanecerse. En las últimas horas, referentes de las organizaciones sociales habían adelantado que no podían seguir esperando los tiempos de la central obrera para avanzar en medidas de fuerza porque no tienen colchón social. Y en eso andan por estas horas.
Es que en la jornada de ayer, en la sede nacional de ATE, dirigentes de distintas organizaciones sociales que vienen compartiendo luchas unificadas, se reunieron para discutir las políticas que lleva adelante el Gobierno, la falta de respuestas a sus demandas, la problemáticas de las economías regionales junto a la impronta de los estudiantes universitarios.
En este marco, se resolvió discutir internamente en cada organización para luego reunirse la próxima semana y así avanzar en posibles medidas de fuerza en conjunto.
Estuvieron presentes Hugo “Cachorro” Godoy y Adolfo “Fito” Aguirre en representación de ATE; Amancay “Chiquito” Ardura, de la Corrientes Clasista Combativa; Omar Príncipe, presidente de la Federación Agraria Argentina (FAA); Esteban “Gringo” Castro de CTEP; Daniel Menéndez, Secretario General de Barrios de Pie; Carlos Achetoni, también de la FAA; Ezequiel Marín y Ernesto Migone de la Federación Universitaria Argentina (FUA); Sebastián Schianchi y Santiago Irurtia del MNCI –Vía Campesina; Roberto Solano y Alejandro Andreani de ASOMA-FNC; Luciano Álvarez de la juventud de la CCC y compañeros de la Federación Nacional Campesina.
Una porción importante de esas organizaciones vienen encarando un plan de lucha que ya instaló ollas populares en la Ciudad de Buenos Aires en reclamo de la creación de un millón de puestos de trabajo en varias oportunidades, pero hasta el momento no consiguieron un canal de diálogo efectivo con el Gobierno Nacional.
