SINDICALES//NACIONALES// Fuente: Info Alimentación // Tres Líneas
La Ley de Góndolas se encamina a atacar uno de los problemas vertebrales de la economía argentina, que es la tendencia a que las gigantes alimenticias formen precios a espaldas de los consumidores, aprovechando las condiciones monopólicas que les ofrece el mercado.
La Ley de Góndolas enviada por el Poder Ejecutivo al parlamento en febrero y aprobada por las dos cámaras en la provincia de Buenos Aires y Santa Fe, se encamina a atacar uno de los problemas vertebrales de la economía argentina.
La “democratización de la oferta”, como es presentada por el proyecto, apunta a reducir el poder de lobby de las grandes alimenticias y los supermercados que negocian aumentos de precios a espaldas de los consumidores, aprovechando su posición monopólica.
Ello impacta en el consumo cotidiano y en la Canasta Básica Alimentaria generando más pobres en la Argentina cada año, y haciendo que las alimenticias acumulen ganancias por encima, incluso del promedio inflacionario, como sucedió la última década, mínimamente.
PyMEs por la democratización de la oferta
Luego de conocerse que las PyMEs ya salieron a pelear un equilibrio en los precios de los productos alimenticios, en rechazo al lobby patronal de las alimenticias que buscan seguir aumentando, ahora se sumaron referentes de supermercados.
Fue la semana pasada, a días de aprobarse la Ley de Góndolas en la provincia de Buenos Aires, y a la espera de su reglamentación, que se encendió la pelea entre pymes y grandes corporaciones alimenticias, por el precio de los alimentos.
Es que las empresas de Alimentos y Bebidas vieron afectado su privilegio y poder de lobby ante el Estado Nacional y ahora comenzaron, por ello, los roces con las pequeñas y medianas industrias con las que deberán compartir espacio en las góndolas bonaerenses.
Pero no solo eso, sino que, además, los representantes de las PyMEs ya piden que las gigantes del sector alimenticio bajen el costo de sus productos para equilibrar los precios en relación con la suba generalizada de los valores, y no por encima del promedio, como vienen haciendo.
Más apoyos a la democratización
Una de las principales entidades encargadas de movilizar el lobby patronal es la Coordinadora de Industrias de la Alimentación (COPAL) que ahora ve afectados sus intereses y busca ir a fondo con la eliminación de los topes a la suba de precios.
Ahora fue el turno, además, de Víctor Fera, dueño de Maxiconsumo, quien consideró que la Ley de Góndolas podría «terminar con el abuso» en los precios. El dirigente afirmó que “muchas veces hace a la inflación, pero la inflación también la hace la devaluación».
El presidente de la Cámara Argentina de Distribuidores y Autoservicios Mayoristas (Cadam), cuestionó los aumentos de precios de algunas empresas productoras de alimentos, y afirmó que la Ley de Góndolas, pendiente de reglamentación, podría «terminar con el abuso».
«No tengo dudas de que la Ley de Góndolas va a bajar los precios; le pondría coto a un montón de cosas, se terminaría la especulación, porque hay empresas que pueden vender más barato pero no están en las góndolas», dijo Fera en diálogo con Radio 10.
«Saliendo de Precios Máximos (la Ley de Góndolas) se va a implementar rápidamente y va a empezar a funcionar; no es lo mismo que haya precios congelados con un sólo proveedor o precios libres con cinco proveedores», remarcó.
Cuestionó además que «los argentinos consumimos de aceite el 5% de lo que producimos y hubo una suba de 50% en los precios internacionales. Con la suba de 50% a nivel internacional, no podemos subsidiar un poquito el 5% ese?”, dijo Fera.
Reglamentar la Ley de Góndolas
Las pymes solicitaron que se reglamente ya la ley de góndolas para armonizar los precios. Las corporaciones, enroladas en la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (COPAL), presionan, en cambio, por eliminar los precios máximos.
Días atrás, la secretaria de Comercio Interior, Paula Español, dijo a Télam que en cuanto a la Ley de Góndolas, que se promulgó en los últimos días de marzo, «estamos muy avanzados y prontamente va a estar la reglamentación».
«El consumo en la primera época de la pandemia había subido muchísimo y después se fue normalizando y hoy está normal, no tengan miedo porque si hay una Ley de Góndolas y con las ventas como están hoy, van a bajar precios», reiteró Fera al respecto.
La COPAL, cada vez más aislada
Las gigantes del sector, las exportadoras, volvieron a dar muestras de su falta de empatía, solidaridad y exceso de mezquindad al pedir que se eliminen los precios máximos y generar subas radicales en los precios de los alimentos que se consumen a diario en el país.
Esa suba de precios impacta de lleno en la canasta básica y genera, más pobres en la Argentina, en función de que la Canasta mide el nivel de ingresos de una familia y las chances de acceder a los consumos mínimos en el período de un mes.
Es más, las alimenticias vienen aumentando precios durante todo el 2020 (y durante los años anteriores) incluso por encima del promedio inflacionario del año, lo que marca que son las responsables de la suba generalizada de precios en Argentina.
Al respecto, Fera señaló que esta Ley de Góndolas «no le gusta a la Copal, no le gusta a las grandes cadenas de supermercados, eso es vox pópuli», y observó que «al haber Precios Cuidados y Máximos y congelados, ya no podría coordinar esto porque serían muchas cosas juntas».
También están las “avivadas” de algunos sectores que remarcan los precios ante una fiscalización que, al menos, resulta insuficiente pese a la queja de los empresarios del sector alimentario.
Funes de Rioja delató al sector de los supermercadistas y de las gigantes del sector, y sus artilugios para propiciar la suba de precios, y es a eso a lo que apuntaron las pequeñas y medianas empresas.
Es que entre un sector y el otro existe una diferencia de intereses clara, puesto que unos apuestan al mercado interno y los otros a la exportación. Por ello, la política de incluir a las PyMEs es la discusión de los alimentos es una decisión acertada del Gobierno.