Los estatales de ATE hicieron el martes un nuevo paro de 24 horas. Fue la cuarta huelga nacional en lo que va del año contra el ajuste en el Estado, con un pronóstico de conflictividad en aumento. “Vemos que el gobierno no está dispuesto a abrir la discusión de ninguno de nuestros reclamos: no quiere discutir las reincorporaciones, ni el pase a planta permanente de los precarizados para que en diciembre no tengamos otra ola de despidos masivos. Quieren clausurar todos estos debates y discutir con los gremios sólo su objetivo de avanzar en una tercera reforma del Estado”, aseguró el titular de ATE, Hugo Godoy.

La jornada de protesta, con movilizaciones en todo el país, tuvo según el gremio un alto nivel de adhesión. En particular, en el caso de Mendoza, la infantería reprimió una manifestación frente a la Casa de Gobierno, mientras que en la ciudad de Buenos Aires se realizó la marcha de mayor masividad, que fue desde la Avenida de Mayo y 9 de Julio hasta el ministerio de Hacienda.

El plan de lucha de ATE viene desde el verano, pero ayer el grueso de las críticas apuntaron contra el acuerdo que el otro gremio de estatales con representación nacional, UPCN, acaba de cerrar con el Gobierno. En lo salarial, el aumento fijado fue del 31 por ciento en tres tramos, que ATE rechaza con el señalamiento de que, anualizado, significará un 27 por ciento.

En contraposición, ayer ATE puso al tope de la protesta su repudio al veto. En el acto frente al ministerio de Hacienda, Godoy anunció que el gremio organizará un referéndum entre los estatales sobre el acuerdo firmado por UPCN. “Vamos a ir en búsqueda de los miles de trabajadores que no están en nuestro sindicato y vamos a proponerles un referéndum: si quieren la tercera reforma del Estado que impulsa Macri o un Estado al servicio de las mayorías populares”, planteó