La Asociación de Gremios Industriales de Santa Fe, que nuclea a más de 35 sindicatos ligados a la producción, alertaron sobre la situación que atraviesan y dispararon: “El gobierno vive en otro mundo”.

“Estamos viendo que el gobierno vive en otro mundo”, criticó el secretario General de Smata, Marcelo Barros, en diálogo con La Politica Online Santa Fe. El dirigente gremial apuntó así a los dichos de Mauricio Macri quien la semana pasada afirmó al diario La Capital que en Santa Fe “los brotes verdes explotan”.

Pero las críticas también alcanzan al gobierno provincial, del socialista Miguel Lifschitz. “Los únicos brotes verdes que explotaron son los del hambre”, advirtió Barros quien consideró que a principios del año próximo podrían haber 7 mil despidos más en la industria automotriz. Se trata de una apreciación inquietante ya que según las estadísticas oficiales por primera vez en noviembre creció la producción automotriz.

“Somos más de 35 gremios que más allá de la procedencia de cada uno o de su inclinación política nos juntamos preocupados por la situación de la industria”, explicó Marcelo Ayimen, secretario General del Vidrio, a La Politica Online.

“Estamos muy mal, vemos que los talleres que instalan GNC ya están despidiendo trabajadores, lo mismo vemos en las autopartistas”, agregó el sindicalista.

En el mismo sentido se manifestó el secretario adjunto, Antonio Milici: “En pocos meses vamos a tener muchos trabajadores suspendidos, con caída del salario, sin horas extras y retiros voluntarios que son despidos encubiertos”.

Por tal motivo, los distintos gremios de las ramas productivas se congregaron en una asociación para monitorear cómo evoluciona la situación del trabajos, los despidos a cuenta gotas, los efectos del tarifazo y la apertura de las importaciones.

En este escenario, los integrantes de la Asociación de Sindicatos Industriales de Santa Fe se reunieron en la sede de SMATA para debatir la situación que atraviesa la producción: “Estamos en alerta y creo, a título personal, que la CGT ya tendría que haber llamado a un paro general”, sostuvo Barros.

“Hay que ver bien de qué manera se instrumenta y que fecha porque tampoco queremos quedar pegados si hay problemas a fin de año que después nos echen la culpa a nosotros”, subrayó el gremialista.