Luego del extenso conflicto del Neumático, que los ubicó en veredas opuestas, Pablo Moyano salió a respaldar públicamente a Sergio Massa. Valoró que es un funcionario que «escucha» y le pidió que empiece «a distribuir para este lado».
El clima económico y social está revuelto es cierto; y eso conlleva a un mayor grado de conflictividad que desde algunos medios sindican como que hay una conspiración mayúscula haciendo foco en el conflicto del Sindicato Único de los Trabajadores del Neumático (SUTNA) conducido por el dirigente clasista Alejandro Crespo.
Es que en el mundo sindical cuando se habla de conflictividad brava -hablamos de piquetes, paros, reclamos de encuadramientos- solamente se mira a los Moyano; lo cual es cierto porque son sus procederes. De repente, y aunque no tanto de repente porque la disputa salarial había arrancado hacía 180 días, la Izquierda, desde el único sindicato que tiene en la industria a nivel nacional, apareció en el tablero mediático y productivo del país.
Más habladurías provocó la foto en la que Pablo Moyano recibió a Crespo en la CGT brindándole apoyo: todo un acontecimiento. Pero la lectura también es desgaste que le generó. Desde su refugio que pasa por seguir siendo, y lo que no es poco por supuesto, secretario general de la CGT, el apoyo de Pablo a gremios que pelean por su paritaria es central. Y siempre que habla repercute en la opinión pública.
Con todo y pese a que Sergio Massa había exhortado al SUTNA a llegar a un acuerdo, lo que se consiguió 48 horas más tarde de esas decisivas declaraciones y luego de 6 meses de discusiones estériles, este sábado y en declaraciones a CNN Radio, Pablo respaldó al ministro de Economía: «Está apretado por el desastre que dejó Macri«, se despachó. Y aventuró: «Le ha tocado a Massa una crisis económica (…) por lo que una vez logrado el Presupuesto empezará a distribuir parte de las ganancias». Completó sobre el funcionario: «Escuchar escucha, está muy preocupado por la realidad del país».
También se le preguntó por las decisiones económicas vinculadas al campo y Moyano consideró: «Dólar soja está bien, pero hay que empezar a distribuir para este lado«. Atado a la economía también el camionero se refirió al acuerdo con el FMI: «Si el otro tipo firmó, vos lo tenés que cumplir, aunque por supuesto a nadie le gusta cumplir con el Fondo Monetario Internacional, menos a un gobierno peronista».
Lejos de volverse de Izquierda, Moyano cerró diciendo: «Vamos a hacer todo lo posible para que el siguiente gobierno siga siendo peronista».
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