El secretario general de la CGT Azopardo, Hugo Moyano, ratificó este martes en el juicio por presuntas coimas en el Senado durante el gobierno de Fernando de la Rúa, que el ex ministro de Trabajo, Alberto Flamarique “nos dijo que para los senadores tenía la Banelco”.
Hugo Moyano al ingresar a Tribunales.
En su declaración bajo juramento ante el Tribunal Oral Federal 3, y con el propio Flamarique sentado a pocos metros, el dirigente camionero dio detalles sobre la famosa frase que hizo estallar el caso de los posibles sobornos para aprobar la Ley de Reforma Laboral sancionada en abril de 2000.
Pese a ello, y casi al final de su declaración, Moyano dejó explícitamente asentado que no tenía “constancias de que hayan pagado coimas”, aunque todo apuntó en sentido contrario: “Para nosotros -dijo-, los senadores peronistas no iban a votar a favor”, como finalmente lo hicieron en su gran mayoría.
Moyano aseguró que la frase se dijo en una cena organizada por el entonces dirigente del gremio de Obras Sanitarias Rubén Pereyra para discutir sobre el proyecto con el ministro.
“Discutimos sobre la ley y al final le dijimos que podía ser que fuera aprobada en Diputados, porque allí la Alianza tenía mayoría, pero no iba a pasar en el Senado, porque allí era el justicialismo el que tenía la mayoría”, precisó.
“`Para los senadores tengo la Banelco`, nos dijo Flamarique, y en ese momento no le dimos mucha importancia”, añadió Moyano, que puso por testigos a los restantes comensales, los extintos sindicalistas Saúl Ubaldini, Juan Manuel Palacios y al anfitrión, así como al todavía jefe del gremio de peones de taxis, Omar Viviani, también citado a declarar.
Una y otra vez debió explicar por qué pasaron dos meses entre la cena, a fines de enero, y su difusión, en marzo, para lo que citó una columna del periodista Joaquín Morales Solá aludiendo al hecho, que desató masivas consultas periodísticas.
“Entonces contamos cómo habían sido las cosas, y que había sido así”, reiteró, no sin antes relatar reuniones con senadores “en las que no obteníamos ni un si ni un no, solo evasivas”, sobre cómo votarían “esa ley impuesta por el Fondo Monetario Internacional”.