El secretario Adjunto de SMATA y principal orador del acto de Plaza de Mayo, Mario «Paco» Manrique, cuestionó al Gobierno de Alberto Fernández por la falta de definiciones económicas. A la vez que envió un duro mensaje a los principales triunviros de la CGT, quienes convocaron a una actividad en Obras Sanitarias: «La CGT no puede estar indiferente a los problemas que tiene la Nación».
«Que haya pobres en un Gobierno peronista es preocupante y vergonzoso. Se debe hacer política, pero atendiendo los reclamos de la gente que es la que necesita soluciones y sabe que no vienen de un día para otro. Hay que recorrer un camino a corto plazo, hay que llamar a la conciencia y a tener fue», disparó el dirigente sindical en diálogo con La990.
Además, continuó: «Hay dos formas de traccionar las cosas, nosotros siempre lo planteamos, creemos que en los días que corren en la Argentina, tenemos que preocuparnos de otras cuestiones más que armar agrupaciones políticas. Por eso decidimos marchar a Plaza de Mayo, con la gente. La CGT no puede estar indiferente a los problemas que tiene la Nación».
El número 2 de SMATA pidió que el Presidente «profundice más en algunas acciones que tienen que ver con la intervención del Estado», y se mostró reticente en el diálogo con sectores empresariales.
«Con el diálogo podes construir si tu interlocutor tiene voluntad verdadera en la resolución de los problemas. Ahora, si te pones a dialogar con alguien que ni siquiera te escucha porque especula o sube los precios… con esa gente lamentablemente hay que endurecerse y aplicar las leyes», apuntó.
«Si hay algo en lo que nos estamos equivocando es en la ausencia del Estado. No les importa porque no pasa nada. A los empresarios no les importa remarcar precios, Braun dijo que remarcaba adelante de quien era ministro de Economía y no lo cruzó adelante de todos sus colegas», apuntó Manrique, y sumó: «Nos pasó con Vicentin, cuando lo anunciamos, no lo concretamos y nos tomaron la medida del aceite».
El dirigente sindical pidió mayor firmeza para controlar a los empresarios, apuntados por remarcar precios, y trabajar en reducir la inflación.
«El diálogo está muy bien pero a veces hay que dejar la Biblia y agarrar el garrote. Hay que tener firmeza, poder político y no pensar tanto», afirmó.
«Estamos naturalizando discutir más de 100% de aumento de salarios. Está mal, entiendo la macroeconomía, la guerra, la pandemia, el acondicionamiento que la deuda nos puso para poder conformar un plan económico, pero la microeconomía de los que trabajamos, eso lo podemos traccionar nosotros sin ningún problema, pasa que hay que tomar decisiones políticas», concluyó.
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