Sietecase: “Falta un debate profundo sobre el periodismo”

 

Reynaldo Sietecase es ahora el conductor del programa Guetap en Radio Vorterix. Durante sus 50 años cosechó una vasta experiencia en su profesión: el periodismo.

Su trabajo fue distinguido en la última edición de los Premios Martín Fierro cuando ganó la estatuilla a la mejor labor periodística por su papel en Dicen que Dicen, programa que se emitía por Radio del Plata. En la ceremonia, brindó un discurso que levantó polémica al decir que el periodismo no es sólo preguntar sino que tiene que ver con “un compromiso ético de contar lo que pasa e indagar en el poder económico”. En el Día del Periodista, le contó a INFOnews qué piensa y cómo ve a su gremio.

Habiendo pasado ya algunos días desde tu comentado discurso en la entrega de los Martín Fierro ¿qué conclusión sacás de la polémica que generó?

Reynaldo Sietecase.
Reynaldo Sietecase.

Sólo dije lo que vengo diciendo hace tres o cuatro años, creo que el escenario potenció lo que expresé. Además algunos colegas se sintieron aludidos en lo personal. Yo nunca hago referencias personales. Creo en la discusión de ideas, en la contraposición de argumentos. Cualquier agravio o descalificación atentan contra el debate. Yo creo que estamos haciendo el peor periodismo desde 1983, sólo para tomar la fecha del retorno a la democracia. Si lo que dije abre un debate profundo sobre cómo estamos haciendo nuestro laburo, bienvenido sea.

¿Cómo ves la situación laboral actual del periodista, en Argentina y el resto del mundo?

Voy a hablar de lo que conozco aunque parezca algo infrecuente en el periodismo. En Argentina como consecuencia de la sanción de la Ley de servicios audiovisuales se desató una confrontación feroz entre el gobierno y los grupos más importantes de medios de comunicación, el resultado es nefasto. La verdad dejó de ser algo importante. En esta “guerra” no importa si lo que se dice es cierto y está chequeado sino cómo eso que se cuenta afecta al otro “bando”. Los que más pierden son los lectores, oyentes o televidentes. Yo trato de llamar la atención sobre esto: la ideología o el posicionamiento de tu medio no puede anteponerse a la verdad de los hechos que debés narrar. A vos te puede simpatizar un gobierno pero si hay un funcionario corrupto hay un funcionario corrupto y lo tenés que contar. Lo mismo pasa “del otro lado”, por los intereses económicos del medio que te contrata no podés manipular los contenidos sólo para afectar a tal o cual funcionario. Eso no es periodismo.

¿Qué reflexión te merecen los ataques sufridos en los últimos días por periodistas en distintas coberturas? ¿Hay una escalada?

Es muy preocupante lo que está pasando. Vuelvo a lo que te decía. Si en lugar de agraviar y descalificar se discuten ideas y argumentos los límites de la agresión se limitan. Veo mucha bronca. A veces recorro el dial, a mí me gusta mucho la radio, y escucho a mucha gente enojada. Eso me sorprende, los que se pueden enojar son los implicados en un hecho o en una política, no los que la cuentan. Es cómo si quisieran acomodar lo que pasa a sus deseos. Eso tampoco es periodismo.

En vista de que hoy se discute como pocas veces (o como nunca) el lugar que ocupa el periodista y la legitimidad desde la que se dice lo que se dice ¿se puede hablar de una grieta en la credibilidad del oficio?

La credibilidad de algunos medios y periodistas está cuestionada. Y con fundamento por lo que te conté antes. La verdad dejó de ser importante. Yo creo que más temprano que tarde la gente pondrá las cosas en su lugar. En definitiva son los consumidores de información los que tienen la última palabra. Un periodista sólo tiene su nombre y si no lo cuida, no tendrá nada.