El Ministerio de Trabajo frenó con una conciliación obligatoria el conflicto que enfrenta a los recibidores de granos y a las empresas de acopio. El sindicato reclama una gratificación salarial por 2021 y ya paralizó el lunes las actividades. Las protestas prometían escalar y frenar el ingreso de divisas. Se abren unas semanas de negociación.
El Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación dictó la conciliación obligatoria en el conflicto entre la Unión de Recibidores de Granos y Anexos de la República Argentina (Urgara) y la Federación de Centros y Entidades Gremiales de Acopiadores de Cereales y la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro), informó la entidad sindical.
El gremio que nuclea a los recibidores de granos venía desarrollando un plan de lucha, que incluyó el lunes un paro de 24 horas, en demanda de una «gratificación salarial» pendiente de 2021.
Ahora las partes tendrán 15 días hábiles -prorrogables por otros 5- para negociar una solución.
El sindicato repudió «la soberbia empresaria» y la «lamentable actitud de las empresas» que «se presentaron en la reunión convocada por el Ministerio de Trabajo sin ningún ofrecimiento», según publicó en Twitter.
«Vinieron con las manos vacías», aseveró la entidad sindical encabezada por Pablo Palacio, que aclaró que la conciliación obligatoria fue dictada «a pedido de la Federación de Centros y Entidades Gremiales de Acopiadores de Cereales y Coninagro».
Urgara tiene 9.000 afiliados en todo el país pertenecientes a los sectores de Puertos Privados, Control y Exportación y Acopio. Integra la Federación Marítima Portuaria y de La Industria Naval de La República Argentina (FeMPINRA) y la Confederación Argentina de Trabajadores de Transporte (CATT).
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